Los biocombustibles son combustibles derivados de materia orgánica, como plantas o residuos animales, que se utilizan como alternativa a los combustibles fósiles tradicionales, como el petróleo y el gas natural.
Es por eso que cada vez más empresas están implementando acciones que contribuyan en el menor impacto en el medioambiente. El sector azucarero también tiene un papel importante en la reducción de emisiones, principalmente a través de la producción de bioetanol a partir de la caña de azúcar.
Este biocombustible es una alternativa más limpia a los combustibles fósiles y puede contribuir significativamente a la reducción de la huella de carbono.
De acuerdo con las mediciones oficiales de la Unidad de Planeación Minero-Energética, UPME, la gasolina como combustible fósil, en Colombia, tiene factores de emisión de alrededor de 2.300 kilogramos por metro cúbico (Kg/m3).
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En la actualidad existen empresas que trabajan en pro de la conservación del medioambiente. Dentro del sector azucarero , la empresa Providencia produce etanol carburante a partir de la miel de la caña, que por sus propiedades contiene altos contenidos de azúcares que son consumidos por cepas especiales de levadura en un proceso de fermentación que produce alcohol, agua y minerales.
Esta empresa ha perfeccionado este proceso para hoy tener el alcohol con la menor huella de carbono del sector, aportando a mejorar la calidad del aire y a la mitigación del cambio climático.
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El sector azucarero tiene un impacto significativo en las emisiones de CO2 , pero también posee un potencial considerable para contribuir a la reducción de estas emisiones, especialmente a través de la producción de biocombustibles y la adopción de tecnologías y prácticas más sostenibles.