La iniciativa forma parte de una campaña internacional puesta en marcha por Brasil, Sudáfrica, Argentina, Uruguay y Gabón y apoyada por organizaciones no gubernamentales como Greenpeace, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés) y la fundación SOS Mata Atlantica, entre otras, según un comunicado de la cartera ministerial.
"La creación del santuario es simbólica y emblemática, pues las ballenas son los mayores cetáceos del mundo y su supervivencia está ligada con el equilibrio de los océanos", dijo Sarney Filho en el acto de entrega de las rúbricas celebrado en Río de Janeiro.
El ministro agregó que uno de los objetivos es extender la prohibición de cazar ballenas, la cual rige en Brasil desde 1987, a todos los países del Atlántico Sur.
Esta semana, el funcionario entregará las firmas recogidas a la Comisión Internacional de las Ballenas (IWC, por su sigla en inglés) y asimismo participará en la votación que se celebrará en Portoroz (Eslovenia) para la posible creación de este santuario.
Casi tres millones de ballenas fueron cazadas en todo el mundo desde que el año 2000, de las cuales un 71 % vivía en el hemisferio sur, lo que ha mermado considerablemente su población, añadió la información.
Se calcula que alrededor de 51 especies de cetáceos habitan en las aguas del océano Atlántico Sur, algunas de ellas son migratorias ya que se alimentan durante el verano en aguas del Antártico para luego reproducirse durante la primavera y el invierno en zonas tropicales.
El proyecto del santuario incluye un plan para estimular la investigación no letal y no extractiva de estos animales, así como el desarrollo de modos de vida sostenibles para las comunidades costeras de la región.
Actualizado: octubre 24, 2016 11:59 a. m.