Trasladan a Villavicencio a fiscal del caso de la Oficina del San Andresito La 38

La fiscal que investiga el caso de la oficina de cobro que operaba en Cali, Medellín, Cartagena, Santa Marta, Barranquilla y Pitalito, pero que se manejaba desde el San Andresito de La 38 en pleno centro de la capital del país, acaba de recibir la noticia de su traslado a Villavicencio “por necesidad del servicio”. En otras palabras, porque necesitan a una fiscal en esa ciudad.

Sin embargo, sus superiores le informaron a la funcionaria judicial que desde Villavicencio podrá continuar con este proceso, para evitar que se venzan los términos y que los capturados queden en libertad en noviembre si no se ha iniciado el juicio, pues se cumple un año desde que los enviaron a la cárcel.

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No obstante, el miedo que tienen las víctimas del proceso es que la fiscal llegará a una nueva ciudad, con unos nuevos procesos que deberá asumir y, además, deberá trasladarse durante horas de una ciudad a la otra para cumplir con las audiencias del proceso contra los integrantes de esta temida oficina de cobro. Por ejemplo, cuando inicia el juicio los jueces generalmente programan las audiencias todos los días de la semana hasta que se acabe esa etapa probatoria, entonces, ¿cómo hará una fiscal con sede en Villavicencio para presentarse todos los días en Bogotá? ¿Tendría la fiscalía que prestarle transporte permanente y pagarle hotel para que pueda comparecer sin interrupciones? Y, ¿qué pasaría si en ese lapso le programan audiencias en Villavicencio? Esas son algunas de las preguntas que tienen las víctimas.

“No se puede seguir utilizando técnicas y tácticas sucias, de vieja guardia, donde a los investigadores los trasladan, a los fiscales los trasladan, donde los cambian de cargo para poder ellos comprar tiempo y salirse con las suyas. Cabe anotar que el que está liderando ese grupo de abogados es Álvaro Escobar Gil, un exfiscal de alto nivel que tiene un hermano magistrado. Está utilizando esas técnicas sucias para poder sabotear el proceso. Cabe anotar que el que si algo me llega a pasar a mí o mi familia, responsabilizo al Estado colombiano”, dijo Miguel Ángel Ruiz, líder de las víctimas de esa organización criminal.

Fuentes de la Fiscalía respondieron que el traslado se debe a que simplemente necesitan un fiscal en Villavicencio y que eso no afectará el proceso.

"El traslado se genera, en necesario, en virtud a que hay una fiscal en Villavicencio que debe ser cambiada de despacho, esto, con base en evaluación del programa de protección. La fiscal de Bogotá asumirá el despacho de la Fiscal amenazada, No existe posibilidad de vencimiento de términos ya que las audiencias del caso de San Andresito La 38 se han desarrollado normalmente", comunicó el ente investigador.

Caso de alto impacto

Este es un caso de alto impacto porque la organización tenía tentáculos en varias ciudades capitales del país. Algunos de sus cabecillas, parecer, eran esmeralderos y tenían alianzas con la temida Oficina de Envigado.

De acuerdo con las investigaciones, los procesados ordenaban la ejecución de homicidios contra diferentes empresarios y comerciantes de esmeraldas, para consolidarse y mantener el control de las minas de Maripí y Coscuez, en Boyacá, pero también se les atribuyen hurtos, desplazamiento forzado y todo, coordinado desde la capital del país.

El proceso y sus cabecillas

en noviembre de 2018, la Fiscalía y la Dijin de la Policía capturaron a 21 personas que harían parte la oficina de cobro que se manejaba desde el San Andresito La 38.

BLU Radio conoció el dossier de la estructura en donde deja claro cuál era el papel de los cuatro jefes más importantes de la organización.

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Aparece como cabecilla de la organización ‘Esmeralderos’ Yerson Esteban Triana Rincón, hijo del esmeraldero Horacio Triana pedido en extradición por narcotráfico Estados Unidos. Según el documento “heredó el imperio esmeraldero del Clan Rincón, ordenó la ejecución de homicidios a diferentes empresarios y comerciantes de esmeraldas, para consolidarse y mantener el control de las minas de Maripí y Cascués es del departamento de Boyacá”.

Aparecen como cabecilla de la organización San Andresito alias ‘Juano’ quien, según el documento, “había coordinado la ejecución de actividades criminales de la oficina de cobro de San Andresito, ordenando la ejecución de homicidios, hurtos, desplazamiento forzado y demás delitos”.

Como tercero en la línea de mando aparece alias ‘Zarco’, quién sería el financiero y el enlace con la Oficina de Envigado. Éste sería el responsable de la ejecución de ajustes de cuentas mediante la modalidad de secuestro en ciudades como Medellín, Barranquilla y Santa Marta.Finalmente, aparece como cabecilla, el jefe financiero de Los Esmeralderos, Álvaro Mujica, quien sería otro comerciante de gemas de Boyacá, aliado con Yerson Triana para el despojo de tierras en Bogotá y, además, la financiación de organizaciones criminales.

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