Luego de que se conociera el caso de una madre y un padrastro que torturaban a dos menores de 4 y 5 años, las evidencias recopiladas por personal de Bienestar Familiar muestran que eran amarrados, quemados y golpeados.
La Procuraduría anunció varias medidas, entre ellas, le pidió a la Comisaría de Familia de la localidad un informe detallado sobre las acciones emprendidas para la protección y verificación de los derechos de los niños afectados.
“Se ha solicitado a laComisaría de familia de ese municipio informar al ente de control lo referente a las diligencias de verificación de derechos, la apertura y estado actual del trámite de restablecimiento de derechos, así como la articulación que se ha adelantado con el ICBF para garantizar las medidas de protección a favor de los menores”, dijo la procuradora delegada para la Defensa de los Derechos de Infancia, Viviana Mora.
En esa medida, la Procuraduría constituyó una agencia especial que solo atenderá este caso, interviniendo en el proceso penal de la madre y el padrastro de estos menores, quienes fueron imputados por tortura agravada y lesiones personales.
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Si bien los hechos ocurrieron hace cuatro semanas, hasta este miércoles salieron a la luz los videos de los terribles maltratos se hicieron virales en redes sociales.
Los niños, ahora bajo la custodia de del ICBF, se encuentran a la espera de encontrar un hogar de paso donde puedan comenzar su proceso de recuperación. Mientras tanto, la madre y el padrastro enfrentan serias consecuencias legales, ya que podrían ser condenados a hasta 10 años de prisión por este aberrante caso de maltrato infantil.
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