Lenny Gizeth Maturana Rodríguez, psicóloga egresada de la Universidad Uniminuto y quien trabaja en la Comisaría de Familia de Pueblo Rico, Risaralda , contó que sobre la 1:00 de la tarde del 22 de junio se enteró de un presunto caso de abuso sexual y que le hicieron valoraciones a la menor . “La encontré tranquila, estable emocionalmente”, dijo.
No hubo carga emocional al momento de referir los hechos y contestó todas las preguntas que le hice. Luego que se hizo la valoración.
Contó que, al momento de la valoración, la menor indígena no tenía tarjeta de identidad ni estaba en la escuela.
Ella me manifestó que ella se encontraba en el colegio y que allá había unos soldados y que uno le había dicho que se fuera para la casa (…) dijo que se encontraba allá sobre las 6:00 de la tarde recogiendo guayabas, ella empezó a irse y que varios soldados la cogieron a la fuerza y abusaron de ella
El testimonio lo rindió en medio del juicio disciplinario que se sigue contra los soldados Juan Camilo Morales Poveda, Yair Stiven González, José Luis Holguín Pérez, Juan David Guaidia Ruiz, Óscar Eduardo Gil Alzate, Deyson Andrés Isaza Zapata y Luis Fernando Mangareth Hernández por el abuso de la menor.
En medio de la audiencia, el abogado Cristian Valencia denunció supuestas amenazas por parte de habitantes de Pueblo Rico, en Risaralda, contra los testigos Jaime Alonso Zapata, Alejandro Palomeque García y José Esau Puertas. El procurador Herman Rincón remitió la información a la Fiscalía para determinar si debe investigar los hechos.
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También rindió testimonio María del Carmen Perea Pino, la trabajadora social que atendió a la menor indígena. Contó que sobre la 1:14 llegó al hospital donde estaba la menor y habló con la mamá.
A la niña se le estaban vulnerando sus derechos en cuanto salud, educación e identidad. No tenía tarjeta de identidad
La mamá dice que la niña “se le había desaparecido un día antes a las 5:00 de la tarde y había aparecido al otro día las 10:00 de la mañana y que al parecer había sido abusada por unos soldados”.
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La niña no estaba estada estudiando, no tenía tarjeta de identidad ni salud.
Alexandra Castillejo Orozco, médico general y subgerente científica del Hospital San Rafael de Pueblo Rico, Risaralda, contó que la menor llegó en horas de la tarde y ella la recibió y le tomó los signos.
“Se trató de una menor de 12 años que ingresó en compañía de la comisaria y una hermana mayor de edad (…) fue remitida del puesto de salud de Santa Cecilia y llegó para ser valorada antes de 72 horas (…) la paciente no quería que la hermana estuviera presente. Cuando la fuimos a valorar no se dejó en sus partes íntimas y se respetaron sus derechos”, dijo. Agregó que llamó a un asistente forense y coordinaron que al día siguiente fuera remitida a otro lugar para hacerle los exámenes.
En el momento del interrogatorio, la menor indígena relató que ella salió hacia las 5:00 de la tarde a recoger guayabas y que se le presentaron unos hombres que “comenzaron a decirle cosas intimidantes”. “También afirmó que ‘le hicieron el amor’, así me lo dijo ella y que ella no quería”, contó Castillejo, quien afirmó que la menor le reveló que luego fue al río y “se lavó”.
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Además, explicó que se había quedado en el ‘cambuche’ y que por la mañana la llevaron a la casa.
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