La Jurisdicción Especial para la Paz confirmó este viernes, 24 de diciembre, la imputación por esclavitud al secretariado de las extintas Farc, lo cual ocurre dentro del macrocaso 001, relacionado con secuestro.
Luego de que los firmantes del Acuerdo de Paz dijeran que no compartían los términos en los que se les endilgaba esa conducta, la JEP produjo esta decisión de 50 páginas en la que, además, se registran hechos que fueron narrados por víctimas.
Según la justicia transicional, se determinó la existencia de tres patrones en la comisión de las privaciones de la libertad: el patrón extorsivo, el de canje y el de control social y territorial, por lo cual se realizará dicha imputación.
Pero, conforme al auto, esas acciones no sólo eran en contra de los secuestrados que estaban en su poder, sino que también afectaban a la población civil en las zonas donde tenía influencia esa organización.
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“Los guerrilleros ordenaban a los civiles realizar diversos trabajos, especialmente cocinar para los guerrilleros (en el caso de las mujeres), manejar carros, camiones o botes (en el caso de los hombres) y realizar trabajos en caminos o en cultivos (para ambos sexos). Algunos de estos trabajos eran impuestos también a los guerrilleros rasos, algunos como cocinar o recoger leña en cuanto castigos. Ello puede haber llevado a la “normalización” de estos trabajos forzados”, dice el documento.
Todo este tema hace parte de una respuesta a la solicitud hecha por la Procuraduría General.
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