En el palacio presidencial, el gobernador de Nariño, Camilo Romero, se defendió luego de que la Fiscalía anunciara que le imputará cargos por los siguientes cinco delitos: falsedad ideológica en documento público, peculado por apropiación en favor de terceros, interés indebido en la celebración de contratos, contrato sin cumplimiento de requisitos legales y revelación de secreto.
"Es inaudito que al único gobernador que declara rentas públicamente, de manera juramentada y que hasta hace mes y medio tenía embargadas sus cuentas personales, intenten acusarlo de corrupción", dijo.
Al gobernador lo señalan por, supuestamente, cometer irregularidades en las nuevas condiciones para la comercialización de 80.000 cajas de aguardiente Nariño.
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"Las condiciones tienen 14 años, lo único nuevo es el fiscal", aseguró luego de reprochar el hecho de haber sido notificado vía Twitter.
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Romero advirtió que detrás de estas acusaciones hay intereses políticos y económicos. Además, aclaró que ha hecho las cosas bien y que podrá demostrarlo con hechos.
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"Pueden entrar al portal de la gobernación y ver cuánto gana el gobernador, cuánto tiene en las cuentas de ahorro. Estamos listos a brindar toda información", señaló.
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El funcionario pidió conocer más pruebas de los supuestos delitos que le imputarán.
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