Como Andrés Camilo Andrade, de 25 años y Geovanny Alcalá, de 38 años, fueron identificados los dos patrulleros de la Policía Nacional que fueron asesinados en el corregimiento de San Félix de Bello, Antioquia.
El hecho ocurrió cuando se encontraban en un establecimiento comercial, en la vía que comunica este municipio del norte del Valle de Aburrá con San Pedro de los Milagros.
Según las primeras informaciones, cuatro hombres habrían llegado en motocicletas y luego de permanecer varios minutos en el lugar empezaron a disparar contra los dos uniformados y cuando emprendieron la huida lanzaron una granada.
El comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, General Javier Martín Gámez, detalló los hechos y anunció la entrega de 50 millones de pesos para quien brinde información que permita encontrar a los responsables.
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"Estaban iniciando a prestar su servicio, les disparan con armas de fuego y posteriormente les lanzan una granada y acaban con la vida de nuestros dos funcionarios. Ofrecemos una recompensa hasta de 50 millones de pesos por las personas que nos brinde información", expresó el comandante.
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De acuerdo con las labores de investigación, se cree que los asesinos se encuentran refugiados en un municipio cercano, por lo que se avanza en un plan candado. Vecinos del sector relataron que era habitual que los uniformados estuvieran en este lugar cumpliendo su labor.
“Generalmente siempre están ahí los dos, ellos normalmente se hacían ahí, pero nada que ver con los negocios. Los carros que van, las motos, incluso a nosotros los peatones nos pedían la cédula para la comprobación en el sistema”, narró un habitante de la zona.
Este es el tercer hecho criminal del fin de semana en departamento de Antioquia contra la fuerza pública. Por su parte, el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, atribuyó el ataque al Clan del Golfo.
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