Caso Santrich, un golpe a la poca credibilidad de Farc

Luego de conocer las evidencias que tiene la Fiscalía contra Jesús Santrich y Marlon Marín, sobrino de Iván Márquez, vale la pena destacar varios puntos importantes:

El primero es que, según los investigadores, no estaban buscando pruebas contra Santrich, sino que dos investigaciones separadas y autónomas, una de la unidad antinarcóticos de la Fiscalía y otra que contó con el apoyo de Estados Unidos, llevaron a encontrar el vínculo del exjefe guerrillero con "La Familia", grupo de narcos que tenían listo un negocio por 15 millones de dólares.

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Lo segundo es que se decidió entregar el caso a Estados Unidos porque contaba con más pruebas desde México y Miami sobre los vínculos de los cuatro capturados con la mafia.

Pero a renglón seguido hay que destacar la tarea investigativa de la Fiscalía y su decisión, según dijo el Fiscal general, con todas las garantías del Estado.

Aunque no es un momento fácil para la implementación del acuerdo, para ver el vaso medio lleno hay que señalar que la justicia actuó rápidamente, con base en los textos del acuerdo del Teatro Colón y se comprometió a entregar garantías a todos los desmovilizados, de base y exjefes, que hayan cumplido los compromisos adquiridos, es decir entre otros no volver a delinquir.

Contra Santrich hay varias pruebas que lo incriminan con una red de narcotraficantes, y su puesta en evidencia golpea severamente la poca credibilidad que tenían las Farc cuando decían como la pobre viejecita, que no tenían ni ropa para entregar de cara a la reparación de las víctimas.

Ahora lo que hay que pedir es rapidez, de Estados Unidos, de la JEP, de la Corte Suprema y del Presidente, para que Santrich y sus secuaces sean enviados ante los jurados en Nueva York.

Y para concluir, los jefes de las Farc deben explicarle al país si apoyan este tipo de delitos, si están implicados en los mismos y en caso contrario, es importante pedirles que dejen de comportarse como pillos y sepan que ya están en la legalidad.