El asesinato del estilista Mauricio Leal , que peinó a famosas y estrellas de Colombia, cuyo cadáver apareció junto al de su madre, Marleny Hernández, en una vivienda en La Calera (Cundinamarca) a finales de noviembre, no termina de generar conmoción en Colombia. Este martes, su hermano, Yhonier Leal, confesó el doble homicidio.
Junto a los cuerpos había una carta manuscrita en la que el estilista decía: "Los amo. Perdónenme, no aguanto más. A mis sobrinos y hermanos dejo todo. Con todo mi amor, perdóname, mamá". En la nota, además, aparecía misteriosamente el número 1124, lo que causó perplejidad a las autoridades.
Conforme avanzaron las investigaciones, se comprobó que el estilista, ya herido y bajo el efecto de unas pastillas tranquilizantes , fue obligado por su hermano a escribir la nota, todo dentro de la trama para hacer parecer que era un suicidio, aunque no encajara por las cuchilladas, poco habituales en un suicidio.
Durante la primera parte de la audiencia de imputación de cargos a Yhoiner Leal , por el asesinato de su hermano Mauricio Leal, y su madre, Marleny Hernández, la Fiscalía reveló el origen del número.
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“Tenía unos trazos inseguros que, no otra persona que estuvo allí, sino Yhoiner, insistía para que elabore la lista”, dijo el fiscal del caso.
Según el representante del ente acosador, el número era una clave del teléfono celular de la mamá, así como de cuentas bancarias.
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“Deja un número: 1124, La clave del teléfono celular de su señora madre y de Mauricio Leal Hernández. Y también la clave de unos token y cuenta bancaria”, aseguró el fiscal.
La cifra hacía referencia al día de nacimiento de Mauricio Leal, el 24 de noviembre, mes 11 del calendario.
Todo apunta a que Jhonier quería quedarse con la herencia de su hermano, fortuna que a su vez las autoridades investigan si fue legítimamente ganada por el peluquero o si, al contrario, está vinculada con lavado de activos.
De hecho, la Fiscalía incautó,con fines de extinción de dominio , de dos propiedades y dos sociedades que estaban a nombre de Mauricio y cuya sucesión ya había iniciado el ahora señalado asesino. Esos bienes sumarían alrededor de 5.000 millones de pesos (poco más de 1,2 millones de dólares).
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Pese a que desde el comienzo Jhoiner Rodolfo Leal Hernández se había declarado ajeno a los asesinatos, la Fiscalía reconstruyó lo ocurrido y el acusado no tuvo otra opción que confesar en la audiencia.
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