Cárcel para dos sargentos por presunto robo de dotación militar en almacenes de Fuerzas Armadas

Este lunes, 3 de abril, la Fiscalía General de la Nación confirmó que le imputó los delitos de concierto para delinquir agravado, utilización ilegal de uniformes e insignias; y fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivo a dos sargentos del Ejército Nacional.

Los sargentos Edison Steven Rodríguez Lancheros y Jorge Alberto Angulo Lozano son los posibles responsables de extraer armas, munición, uniformes y otros elementos de los batallones con fines de tráfico ilícito.

Según la investigación, los funcionarios, al parecer, se valieron de su posición y cargos para obtener de manera irregular material de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, y ponerlo a disposición de particulares.

Rodríguez Lancheros se desempeñó como bodeguero en una sede militar de Medellín, Antioquia, entre 2021 y 2022, y durante esta etapa habría desviado armas y municiones de manera sistemática. Para que no lo descubrieran, el sargento modificó los documentos de inventario y alteró las cantidades de material que eran despachadas a las distintas unidades.

Este suboficial fue trasladado a un batallón en Chocó a finales de 2022, donde hay indicios de que siguió con la actividad ilegal hasta el día de su captura, en un apartamento de Medellín. En las diligencias, los investigadores del CTI y del Gaula Militar encontraron 300 cartuchos para fusil, vainillas de proyectiles percutidos, uniformes y un casco del Ejército Nacional.

Angulo Lozano fue almacenista de un batallón de apoyo y servicio del Ejército Nacional, en Medellín, es señalado de contribuir a la desviación de armamento y munición para fusil y la adulteración de los inventarios para tratar de ocultar la salida de estos elementos a manos de terceras personas.

Según la inspección realizada al almacén a cargo de este funcionario, se pudo establecer que faltaban 28.000 cartuchos calibre 5.56. Posterior a esta situación, el sargento, presuntamente, logró su traslado al Fuerte Militar de Tolemaida (Tolima) en enero del año en curso; donde posiblemente, igual que el otro uniformado, continuaba con los actos ilegales. Por esta razón, los uniformados fueron enviados a la cárcel.

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