Alegando que el Cementerio Jardines de la Eternidad está ubicado en el municipio de Puerto Colombia y no en la capital del Atlántico, la Alcaldía de Barranquilla impugnó el fallo del Juzgado Cuarto Penal Municipal que le ordenó a esta Administración Distrital exhumar allí un cuerpo para constatar si corresponde al de la enfermera Marilyn Pérez.
La mujer falleció el pasado 6 de julio a causa del COVID-19, perosu cuerpo habría sido sepultado por una familia desconocida, en medio de un cambiazo de cadáveres.
La confusión se produjo entre la clínica donde falleció la enfermera y la funeraria Jardines de la Eternidad,
contratada para sus exequias, por lo que el juez también ordenó que ambas empresas le presenten excusas públicas a la familia, aceptando el error o el descuido cometido."Pero la funeraria también impugnó el fallo, dice que no va a pedir disculpas porque ellos no cometieron ningún error", expresó Katherine Hernández, hija de la fallecida.
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" Yo sabía que esto sucedería, era de esperarse, tanto la funeraria como la clínica siempre se han revictimizado, ellos no han cargado con la responsabilidad de lo sucedido, entonces no queda más que esperar", agregó.
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Aunque tres familias resultaron perjudicadas por este error, a mediados de julio, la Fiscalía decidió archivar las tres denuncias que los afectados interpusieron en contra de estas empresas.
La fiscal a cargo señaló que no encontró evidencia para determinar que la clínica o la funeraria incurrieron en el delito de irrespeto a cadáveres, pero los parientes de la enfermera continúan su lucha para que, a través de una exhumación, se confirme si sus restos yacen en el Parque Cementerio Jardines de la Eternidad, como les aseguró la clínica días después.