Aida Merlano niega haber entregado plata a la poderosa familia Montes para comprar votos en Bolívar

Aida Merlano tuvo su primer cara a cara con los magistrados de la Sala de Instrucción Penal de la Corte Suprema de Justicia, que es la que investiga la supuesta entrega de 5.000 millones de pesos que ella le habría entregado al exrepresentante a la Cámara del Partido Conservador Emeterio Montes, heredero de William Montes, el parapolítico condenado. Según la investigación, ese dinero habría salido de Julio Gerlein y habría sido destinado para comprar votos en el departamento de Bolívar en las elecciones de marzo de 2018.

En esta ocasión, Merlano le salvó la espalda al clan Montes de la costa, pues, ante un magistrado de la Corte Suprema, negó haber entregado dineros a esa poderosa familia para comprar votos, pero sí admitió su responsabilidad en los delitos por los que ya fue condenada (los dos procesos por corrupción electoral).

La excongresista reiteró y entregó algunos detalles sobre sus señalamientos en contra de otros partícipes en esos delitos de corrupción electoral en Atlántico, entre ellos, contra Arturo Char, Álex Char y Julio Gerlein, pues, según Aida Merlano, ellos fueron los principales promotores y financiadores del entramado delictivo diseñado y puesto en marcha desde la sede política de Casablanca, en Atlántico.

En las próximas semanas, la Sala de Instrucción de la Corte Suprema decidirá si abre una investigación formal contra la exrepresentante, o no.

Aida Merlano ha sido condenada en dos ocasiones por la Corte Suprema de Justicia, que la encontró penalmente responsable por los delitos de concierto para delinquir, corrupción al sufragante y violación de topes o límites de gastos electorales en esa misma campaña del 2018, pero en lo que tiene que ver específicamente en delitos contra los mecanismos de participación democrática en el departamento del Atlántico, en la sede Casablanca.

Es decir, las dos condenas que tiene se refieren a hechos ocurridos en Atlántico y la nueva indagación preliminar se refiere a hechos supuestamente ocurridos en Bolívar.