Los combates entre las Fuerzas Militares y el Clan del Golfo dejan, hasta el momento, siete miembros del grupo ilegal abatidos según los reportes que han entregado las tropas desde el terreno.
La confrontación, que comenzó desde la mañana del domingo, 30 de julio, se ha dado en varios puntos de la zona rural del municipio de Medio Baudó, el sur del departamento del Chocó y cerca del océano Pacífico por lo que también participó la Fuerza Naval del Pacífico de la Armada en apoyo al Ejército Nacional.
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Las operaciones también han permitido la captura de cuatro miembros y la incautación de varios armamentos. Con apoyo de autoridades judiciales, tratan de verificar si entre los abatidos hay un cabecilla que dirigía la actividad ilegal en la zona.
Así mismo, los militares tratan de estabilizar la situación de orden público para evacuar a los capturados y los cuerpos para su plena identificación y demás actos urgentes. Hay preocupación por los nuevos hechos de desplazamiento o confinamiento que puedan desencadenar los recientes combates.
Recordemos que hace unos días cayó alias ‘Camilo’ o ‘Camila’, señalado cabecilla del Clan de Oriente de este grupo al margen de la ley.
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“Gracias a un trabajo de inteligencia y la presión ejercida por tropas de Gaula Militar Oriente, se logró ubicar a este individuo, por quien la Gobernación de Antioquia ofrecía una recompensa de hasta 60 millones de pesos”, señaló la Séptima División del Ejército que opera en este departamento y en Chocó.
Los hechos ocurrieron en el centro poblado Macanal, situado en el municipio de San Rafael, departamento de Antioquia. Soldados, acompañados por funcionarios de la Fiscalía General de la Nación, se dirigieron al lugar para ejecutar la captura, por orden judicial, de un individuo y otros cinco sospechosos, quienes se presume formaban parte de una organización criminal.
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Este individuo, señalado como el presunto cabecilla, aparentemente sería el cerebro detrás de homicidios selectivos, así como de amenazar a la población civil para fomentar los cultivos ilícitos. Además, se le acusa de extorsionar a comerciantes, al sector minero y de transporte.
Adicionalmente, se le atribuye la responsabilidad del paro armado que ocurrió en los municipios de Argelia en Cauca y en Nariño, durante el mes de febrero de 2023, donde llevó a cabo sus actividades delictivas. Durante la operación militar se incautó una pistola, proveedores, cartuchos y un teléfono celular.
El Ejército Nacional continuará desarrollando operaciones con otras entidades del Estado, con el fin de seguir brindando seguridad y tranquilidad a los habitantes en esta región del país.
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