Esta pista conecta a Colombia con la extinción masiva de la especie animal que dominó nuestro planeta por cerca de 160 millones de años: los dinosaurios, que junto a otras especies, desaparecieron hace 66 millones de años cuando, según expertos, un meteorito impactó lo que hoy se conoce como la península de Yucatán, en México. El cráter resultante fue nombrado Chicxulub, que en lengua maya significa ‘cola del diablo’. (Lea también:¿Estamos solos en el Universo? Conozca la teoría de la extinción extraterrestre )
La roca espacial, de unos 10 kilómetros de diámetro -similar a la altura del monte Everest, que mide 8,84 kilómetros-, impactó con la superficie del planeta de manera tal que la plataforma continental mexicana se fundió.
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El material resultante fue lanzado a la atmósfera y regresó a la Tierra en forma de pequeñas gotas, en una lluvia de pequeños cristales que cayeron a lo largo de todo el hemisferio occidental, dejando pistas de un pasado que la humanidad desconoce prácticamente en su totalidad.
En diálogo con Bluradio.com Hermann Bermúdez detalló cómo descubrió en Colombia parte del material de ese meteorito en inéditas condiciones de conservación: “Casi intacto, igual a cómo llegó a nuestro planeta hace 66 millones de años”.
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El científico egresado de la Universidad Nacional de Colombia explicó a este medio que en Gorgonilla encontró una capa de 2 cm de espesor “que contiene unas pequeñas esferas que los geólogos llaman esferulitas, resultado del impacto de ese meteorito”.
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En este caso, “las esférulas se generaron por el meteorito que impactó la Tierra en la península de Yucatán (…) En esa época Gorgonilla no era una isla, como hoy, pues estaba sumergida en el mar y estas esferulitas cayeron por la columna de agua y se depositaron en una capa en el fondo oceánico”.
El trabajo desarrollado por Bermúdez y su equipo de colaboradores supone la primera ocasión en que se encuentra este tipo de depósitos “no solo en Colombia sino en toda Suramérica y el pacífico oriental”, pues la mayoría de localidades donde se han encontrado vestigios del meteorito están al noreste de México, en el sur de Estados Unidos, y algunas zonas del Caribe.
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“A diferencia de estos, la localidad colombiana tiene una característica única, que incluso asombró a expertos internacionales que nos acompañaron y financiaron la segunda fase de campo, pues señalaron que era impresionante el estado de conservación”, reveló.
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Hermann cuenta que “estas esferitas, con el paso del tiempo, tras millones de años, se van transformando en arcilla y solo queda la forma de la esfera, en cambio en Gorgonilla estas son todavía del material original, la mayoría está tal cual intacta como cayó hace 66 millones de años”.
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Bermúdez califica el estado actual de las esferulitas como “un misterio”, pues “en las localidades más famosas en el mundo, ubicadas en Haití y el noreste de México, no conservan más del 10 ó 20 % del material original del vidrio, el mineral original; mientras que en Colombia está el 90 %”.
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Su teoría es que el inédito nivel de conservación es fruto de que el depósito de Gorgonilla estuvo sumergido bajo el mar por millones de años, “y apenas hace unos 5 millones de años o tal vez menos, la isla emergió debido a movimientos de las placas tectónicas”.
Finalmente, explicó que el hallazgo es importante porque aporta datos inéditos a la ciencia sobre cómo era el comportamiento de estas esférulas hacia el sur del punto de impacto para tratar de entender ese fenómeno.
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El estudio de Hermann Bermúdez ha recibido el apoyo y reconocimiento de varias personalidades del mundo científico, entre ellas la geóloga colombiana más importante en la actualidad, Adriana Ocampo, quien lidera la división planetaria de la NASA.
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Ahora, el objetivo de Hermann es incluir la investigación en un documento que se tramitará ante la Unesco para convertir al parque nacional de la isla Gorgonilla en patrimonio geológico de la humanidad.
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Fotos: Hermann Bermúdez*
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