El Banco de la República hizo un recorte consecutivo en sus tasas de interés: quedaron en el 11,25 %, luego de la disminución de 50 puntos básicos aplicada el viernes pasado. De esta manera sigue haciendo su tarea para reactivar la economía en la medida en que la inflación nacional y factores externos se lo permitan. El Gobierno quería una reducción más fuerte, pero aún así ya se está sintiendo más a gusto con la nueva tasa de interés contrastada con el nivel de la inflación.
Lo dijo el propio presidente Gustavo Petro en sus redes sociales. Pero él sabe que la economía no se reactiva únicamente a punta de tasas de interés. Se necesita desde la política pública un plan de choque o de reactivación, como desde hace un año lo vienen pidiendo sectores empresariales.
Es así como el presidente Petroconfirmó que presentará un paquete de reactivación el próximo 20 de julio, con la inversión forzosa como eje central, un tema que cada vez se mete más en su cabeza. Para él, esto mejoraría la situación financiera de los bancos y sería una medida transitoria que tendría una vigencia de apenas dos años, para dirigir recursos hacia la industria y la vivienda principalmente.
¿Qué es una inversión forzosa?
El Gobierno no ha entregado detalles definitivos sobre cómo se implementaría, pero en la práctica buscaría obligar a los bancos a prestarle cierto porcentaje de la plata que tenemos ahorrada todos los colombianos en esas entidades a ciertos segmentos de la economía.
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Hoy la cartera crediticia es de unos $686 billones. Inclusive, el presidente Petro ha propuesto que los bancos comerciales le den la plata a él o al gobierno para que sea el sector público quien haga los préstamos, y tiempo después el gobierno le regresaría el dinero a los bancos. ¿Si se llegara a implementar así, qué garantía tendrían los ahorradores de que les devolverán la plata? El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se ha reunido ya con los presidentes de estos grupos financieros y reveló que le hicieron una contrapropuesta para dirigir voluntariamente inversiones o préstamos hacia sectores que necesitan fortalecerse, pero a las buenas y no de manera forzada, lo que también están analizando.
Asobancaria rechaza la propuesta del presidente de la República. Dice el gremio que sería una medida forzosamente inconveniente que no funcionó en el pasado y que, al contrario, encarecería el crédito para el resto de los colombianos. Con el mensaje que puso el presidente Petro el fin de semana, será entonces el Congreso de la República el que tenga la última palabra sobre las inversiones forzosas de los bancos comerciales.
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