Cuando nos ruborizamos por causas emocionales como la vergüenza o el nerviosismo, así como la ingesta de alcohol, se dilatan los vasos sanguíneos de la piel, según el portal especializado ABC Farma.
La ciencia aún no ha encontrado una razón de porqué algunas personas se ruborizan más que otras, pero diversos estudios apuntan a alguna anormalidad en la hormona serotonina, conocida como la hormona del placer o del humor.
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Debido a que algunas personas desarrollan traumas sociales al ser extremadamente sensitivas a la opinión y reacción de la gente por su ruborización, se han desarrollado diversos remedios para evitar el enrojecimiento que pasan por el consejo de psicólogos e incluso el uso de terapias cognitivas del comportamiento y fármacos que modifican los niveles de serotonina.
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