La economía de Brasil, que ocupa el onceavo lugar en el mundo, ha entrado en una fase de crisis que podría tener repercusiones importantes para Colombia. La caída de la bolsa brasileña en un 5 % ha alertado a economistas y analistas sobre el futuro.
Felipe Campos, economista y gerente de inversión en Alianza Valores, explicó en diálogo con Mañanas Blu con Camila Zuluaga, la magnitud del impacto que esta situación puede tener en Colombia y otros países de la región.
Causas de la crisis brasileña
La crisis actual en Brasil ha sorprendido a muchos. A pesar de ser un gran exportador de productos como el petróleo y alimentos, enfrenta una debilitación inesperada de su economía.
Campos comentó que el aumento del déficit fiscal bajo el Gobierno de Lula , que ha incrementado desde los tiempos de pandemia, ha llevado a tensiones entre el Banco Central y el Gobierno, que “ya no es como antes”.
“El impacto es muy rápido. Lo de Brasil nadie lo vio venir porque es la economía 11 del mundo. Brasil tiene un superávit en cuenta corriente (…) Ellos le venden mucho más fácil al mundo de lo que necesitan. Entonces, traer dólares para ellos no es problema, también ha aumentado la producción de petróleo en más de un millón de barriles en una década, producen tres millones y medio de barriles, unos grandes productores de alimentos y han crecido al 3 % los últimos dos años”, precisó.
Conexión con la economía colombiana
Colombia, a pesar de ser un país con dinámicas distintas, está interconectada con Brasil. La crisis brasileña no solo afecta el sistema financiero local, sino que también se traduce en una reducción de la inversión en la región, según detalló.
Publicidad
Y es que, añadió, si estos países enfrentan dificultades, Colombia experimenta automáticamente una disminución en los flujos de capital. Campos destacó que "el riesgo sistémico es alto, dado que países como Brasil y México definen gran parte de las decisiones económicas en la región".
Influencia de la economía estadounidense
Mientras tanto, el crecimiento de la economía estadounidense genera incertidumbre. A medida que la economía de EE. UU. parece fuerte, puede provocar flujos de inversión hacia el norte, así debilitando aún más a las economías latinoamericanas.
Publicidad
"No significa que, si a ellos les va bien, a nosotros nos va bien", enfatizó Campos.