El Gobierno Nacional está estudiando poner en marcha un programa de normalización en el pago de cesantías para aquellos empresarios que no podrán cumplir con la obligación de consignarlas este 14 de febrero.
Aunque gremios hoteleros, restauranteros y de pymes han advertido que los empresarios no tienen cómo pagar después de los cierres de enero, el Gobierno no moverá el plazo. No porque no quiera sino porque no se puede: el cronograma de consignación de cesantías está establecido en la ley y solo puede ser modificado por otra ley o por un decreto de emergencia.
Lo que sí se está planeando es una estrategia para que los intereses no se coman vivos a los empresarios porque, como están las cosas, hoy, por cada día de demora, tendrán que pagar un día de sueldo en intereses.
La idea es crear un plan de normalización que permita alivios para que los empresarios se pongan al día; algo muy similar a los programas de normalización de impuestos con la Dian que han pasado en las últimas reformas tributarias.
Todavía se está analizando si ese plan requiere una ley o un decreto y cuál es el camino legal para sacarlo adelante.
Por otro lado, el Gobierno espera que los empresarios aprovechen los créditos del Fondo Nacional de Garantías para cumplir esta obligación. Todavía hay un cupo de unos 25 billones de pesos que está disponible.