"Con la baja de la inflación, porque para el año entrante todos los analistas esperan una baja de la inflación, eso va a querer decir que los salarios reales van a aumentar, contrario a lo que pasó este año", dijo el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo.
Eso quiere decir que los hogares recuperarían una parte del terreno perdido y podrían tener un poco más de espacio para gastar.
Ocampo es consciente de que el año entrante no será "brillante" en materia de crecimiento económico porque afectará la recesión en el mundo entero, pero tampoco será "negativo" y a Colombia le irá mejor que a otros países en la región.
Entre sus razones para ser optimista no solo está la baja de la inflación, sino también el hecho de que las tasas de interés bajarán en el mundo, y la expectativa de que la reforma tributaria impulse el gasto público y la economía.
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"Esas ganancias (las de las empresas de petróleo y carbón) no generan gasto. En cambio, si se recogen con impuestos y se gastan, en especial en programas sociales, ahí sí hay gasto", dijo Ocampo durante su intervención en un foro de la Revista Forbes.
El funcionario y su equipo creen que la exploración en petróleo y gas no se va a ver afectada por los nuevos impuestos al sector, debido a que la rentabilidad de los proyectos no se verá afectada. Según Ocampo, hay que tener en cuenta que la exploración que se hace a la fecha da resultados a la vuelta de cinco años y, para entonces, se cree que el ciclo de altos precios del petróleo terminará y con él desaparecerá la sobretasa al sector.
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