El año pasado se detectaron 146.308 casos de robo externo en los almacenes de cadena del país, Fenalco estima que por cuenta de los micro robos los comercios tuvieron pérdidas de más de 248.000 millones de pesos en el 2019.
El 42% de todas las pérdidas en el inventario de los supermercados obedeció a robos internos y externos, a fraude de proveedores y a errores administrativos.
Dentro del top de los productos más robados se encuentran, las gaseosas, los enlatados; licores, dulces; los carros coleccionables tipo ‘Hot Weels’; artículos de aseo personal y de droguería; ropa en general, comida para animales y granos sobre todo lentejas.
Pero no todos los robos los hacen personas ajenas, el 28% de los robos corresponde a robos cometidos por funcionarios o empleados. Según el censo, las regiones que más registraron casos fueron la costa Atlántica, la Pacífica y en el centro del país.
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En cuanto a las modalidades, en el robo externo las más frecuentes son ocultar mercancías en prendas, bolsos y carteras, en bolsas de aluminio, cambio en el código de las mercancías, y la sustracción aprovechando que no se entrega bolsa plástica.
En el robo interno las más comunes son camuflar la mercancía en ropa, el consumo de los alimentos en las tiendas o la mercancía que no entra, pero que sí se factura.
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En las dos modalidades hay participación de bandas organizadas que tienen por objetivo muchas veces la reventa de los productos.