Naturgas le está pidiendo al gobierno de Gustavo Petro que no renuncie a la exploración de nuevos yacimientos de gas, porque ese combustible se convirtió en una de las alternativas que ve el mundo para transitar hacia las energías limpias.
De hecho, el parlamento europeo incluyó esta semana al gas natural en el listado de energías verdes, lo que le da un espaldarazo mundial a esta industria.
En campaña Petro dijo que no firmaría nuevas áreas, pero el fin de semana su ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, sugirió que primero revisarán las cifras.
“Debemos seguir explorando áreas sobre las cuales no hemos obtenido información geológica suficiente con el ánimo de obtener mayor provecho dentro de los estándares ambientales que tenemos. Entonces son los contratos actuales y, claramente, si hay interés de inversionistas por explorar nuevas áreas, Colombia debería mantener esa posibilidad a futuro para poder garantizar el gas natural y el acceso al mismo”, dijo la presidente de Naturgas, Luz Stella Murgas.
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Para Murgas los contratos actuales no son suficientes para desarrollar el potencial de reservas en gas. Hoy Colombia tiene reservas para 8 años, que podrían convertirse en 100 con la combinación de varias fuentes: nuevos hallazgos en la cuenca Sinú-San Jacinto, yacimientos costa afuera y fracking. De las tres, Petro y su futura ministra de ambiente, Susana Muhamad, ya descartaron el fracking por completo.
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Actualmente, más de 10 millones de familias cocinan con gas natural. Además, se usa en la industria, en una creciente flota de vehículos públicos y privados, y en las plantas térmicas que el país enciende para generar energía en épocas de bajas lluvias.