La era del gas barato en Colombia está llegando a su fin, ya que después de 50 años el país tendrá que importar gas natural para atender la demanda básica de hogares y empresas, algo que no había ocurrido hasta el momento.
Según los cálculos del Informe de Gas de Promigas , entre mayor sea la cantidad de gas importado y menos se planeen las compras, más subirá la factura a los usuarios finales.
Por ejemplo, si la mitad del gas natural que llegará a los hogares fuera importado, los usuarios tendrían que pagar un 23 % más en la factura mensual.
Según Ecopetrol, la cantidad de gas importado en el sistema el próximo año será del 12 %, pero año a año la cantidad de gas importado necesario aumentará hasta que entren en operación los proyectos de gas natural de La Guajira.
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Algunas ciudades se verían más afectadas que otras. Por ejemplo, no se espera que el gas suba en Barranquilla, ni siquiera con las importaciones; en Cali, la factura podría incluso bajar si se importa gas a través de Buenaventura. Sin embargo, en Bogotá el panorama es diferente.
"Cuando se revisa en los distintos escenarios propuestos la variación del costo en la facturación mensual de los usuarios de Bogotá, producto de un mix de suministro nacional y GNL importado por Cartagena, se perciben en los usuarios residenciales de los distintos estratos variaciones que oscilan entre $3.000 y $13.000. Esta variación alcanza hasta $256.000 en los usuarios comerciales y $13.881.000 en los usuarios industriales", indica el documento.
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El incremento en el costo del gas también dependerá de los contratos que firme la industria y de la planeación. Si los contratos son a largo plazo, el impacto en la factura puede reducirse. Por ello, desde Promigas piden al Gobierno que establezca medidas para que las compañías puedan comercializar ese gas.
"De no contratar GNL a largo plazo y recurrir al mercado spot, los incrementos podrían llegar al 32 %. En un escenario donde el GNL sea la única fuente de suministro y se adquiera exclusivamente en el mercado spot, el aumento en la factura del usuario residencial podría acercarse al 40 %", señaló Promigas.
Actualmente, la industria espera que el gobierno adopte un decreto que permita la comercialización del gas importado en medio de la dificultad para firmar contratos garantizados de gas para el próximo año. Según cálculos de Naturgas, las necesidades de contratación alcanzan los 120 GBTUD, pero solo hay 43 GBTUD disponibles.
El Gobierno y la industria instalaron en las últimas semanas un Puesto de Mando Unificado para monitorear el suministro de gas el próximo año.
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