El Barcelona anunció este martes haber llegado a un acuerdo para renovar los contratos con Gerard Piqué, Clément Lenglet, Marc André Ter Stegen y el joven Frenkie de Jong, incluyendo "una adecuación salarial temporal" en tiempos de pandemia.
Piqué amplía su contrato hasta junio de 2024, mientras que Ter Stegen seguirá hasta 2025 y Lenglet y De Jong amplían sus vínculos con el club azulgrana hasta el 30 de junio de 2026, informó el Barça en un comunicado.
El central español prolonga dos años su contrato con el Barça y "su cláusula de rescisión queda fijada en los 500 millones de euros" (591 millones de dólares).
La ampliación de contrato queda sujeta a que el jugador dispute "una determinado número de partidos a partir de la temporada 2021-2022", añade el comunicado.
En el caso del portero alemán, el contrato se prorroga tres años más fijándose también la cláusula de rescisión en los 500 millones de euros.
Lenglet, que contaba con contrato hasta 2023, amplía en tres años su vinculación "y la cláusula de rescisión queda fijada en 300 millones de euros (354 millones de dólares)".
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El cuarto jugador en ampliar es Frenkie de Jong, llegado en 2019 al equipo azulgrana hasta 2024, amplía por dos años su vinculación y sitúa su cláusula de rescisión en los 400 millones de euros (472,9 millones de dólares).
"Estos acuerdos se han cerrado tras semanas de negociación e incluyen una adecuación salarial temporal, dadas las actuales circunstancias derivadas de la crisis provocada por la Covid-19", añadió el Barça en el comunicado.
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Según la prensa española, el Barça había pedido a sus jugadores que acepten una rebaja salarial o permitan aplazamientos de pagos para hacer frente a la dura situación financiera causada por el covid-19.
Estas ampliaciones de contrato se enmarcarían en estos movimientos de buscar soluciones a los problemas financieros.
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"La rebaja que asumen estos jugadores ronda el 30% de su actual salario", afirma este martes la edición en línea del diario Sport, que irían recuperando con la ampliación de su contrato.
El Barcelona anunció el pasado 5 de octubre unas pérdidas de 97 millones de euros (114 millones de dólares) en la pasada campaña, en la que ingresó 855 millones de euros (1.000 millones de dólares), 203 menos de los previstos inicialmente, debido a la pandemia.