El Rayo Vallecano sumó su cuarto triunfo consecutivo de la temporada en su estadio al imponerse con goles de Mario Hernández y el francés Randy Nteka al Elche (2-1), en un partido en el que el colombiano Radamel Falcao se quedó en el banquillo sin jugar.
El partido comenzó con el Rayo dominando todas las fases del juego ante un Elche que dejó que los locales propusieran y llevaran la iniciativa a la espera de algún fallo. Ese fallo se produjo a los catorce minutos, cuando el canterano Mario Hernández, debutante en Primera, perdió un balón que tras una jugada rápida llegó al argentino Lucas Boyé, que desde la frontal se sacó un disparo por bajo que Dimitrievski no acertó a desviar pese a que lo tocó con las manos.
El mismo protagonista, Mario Hernández, fue el encargado de redimirse de ese fallo anterior para igualar la contienda a los 25 minutos con un cabezazo dentro del área tras un centro de su compañero Santi Comesaña.
Con el empate, el partido entró en una fase distinta, de mayor igualdad, aunque fue el Rayo el que buscó con más insistencia un gol que pudo llegar con un disparo de Isi Palazón que se fue lamiendo un poste.
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Con esa misma tónica comenzó la segunda parte, en la que el Rayo volvió a mostrar sus credenciales centrando todo su juego en el campo rival y poniendo a prueba a Kiko Casilla con sendos remates de Sergi Guardiola y Esteban Saveljich que supo atajar bien el portero.
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La entrada al césped de Randy Nteka revitalizó al Rayo. De hecho, el delantero francés fue el encargado de fabricarse el segundo gol de su equipo con una buena jugada individual que terminó con un disparo potente desde fuera del área inalcanzable para Casilla.
Ese gol fue el detonante para que Fran Escribá también moviera su banquillo para realizar un triple cambio sacando a Josan, Raúl Guti y el argentino Pablo Piatti, pero ninguno de los tres fue el revulsivo ofensivo que necesitaba su equipo.
La lesión del central montenegrino Esteban Saveljich y la necesidad de dotar de músculo al centro del campo provocaron que Andoni Iraola tuviera que hacer casi obligado los dos últimos cambios, dejando en el banquillo sin jugar a Falcao, que se llevó una buena ovación de su afición cuando salió a calentar.
Los últimos minutos fueron un asedio continuo del Elche, que buscó la igualada botando balones al área con todo el equipo volcado, aunque el Rayo supo defenderse bien y aguantar hasta el final de los ocho minutos de tiempo añadido. Aun así, Carrillo, con un remate dentro del área que se marchó por encima del travesaño, pudo igualar en la última jugada del encuentro.