Si la selección de Brasil fuera una economía, en 2023 habría entrado en recesión. Los pentacampeones del mundo cierran uno de sus peores años, con turbulencias en torno al DT y el presidente de la CBF, Neymar de baja y varios antirrécords a cuestas.
El comienzo de año ya daba para pensar que la 'Amarela' iba a tener un camino enrevesado: tras la salida de Tite (2016-22), anunciada antes del fracaso en el Mundial de Catar-2022, la selección tardó hasta julio en tener técnico en propiedad.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) nombró por un año a Fernando Diniz, entonces comandante de moda en Sudamérica por su fútbol ofensivo y vistoso con el Fluminense de Rio de Janeiro.
La apuesta del ahora apartado presidente de la entidad, Ednaldo Rodrigues, era que Diniz dirigiera hasta que Carlo Ancelotti terminara su vínculo con el Real Madrid y asumiera el mando del 'scratch' para la Copa América-2024 y guiarlo al Mundial-2026.
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Pero el italiano no ha reconocido públicamente el acuerdo y Rodrigues fue retirado del cargo por un embrollo judicial a principios de diciembre, sembrando dudas sobre ese plan.
Además, la imagen de Diniz se ha debilitado a pesar de haber ganado en noviembre la primera Copa Libertadores del 'Flu', cuya dirección técnica compagina con la de Brasil en un hecho inusual y cuestionado.
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"Pasando vergüenza"
"El momento de la selección es de los peores de la historia. Estamos caminando a pasos largos hacia el fondo del pozo", escribió recientemente el exinternacional brasileño Walter Casagrande en el portal UOL.
Con Diniz, de 49 años, la 'Seleção' tuvo su peor inicio de la historia en la clasificatoria mundialista: dos triunfos, ante los colistas Bolivia (5-1) y Perú (1-0), en seis partidos.
Empató en casa con Venezuela (1-1) y perdió al hilo frente a Uruguay (2-0), Colombia (2-1) y Argentina (1-0).
El revés en el Maracaná contra sus archirrivales dejó hitos en la eliminatoria: derrumbe del invicto histórico en casa y tres derrotas seguidas por primera vez.
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Nadie pone en duda que Brasil clasificará al Mundial-2026, pero alarman el mal juego y la sexta posición que ocupa en una larga eliminatoria en la que participan diez selecciones y que se reanudará en septiembre.
"Estamos pasando vergüenza y tenemos que reaccionar urgentemente para que no sucedan cosas peores de las que ya estamos viendo (...) Ya no asustamos a nadie", afirmó Casagrande.
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Convencido de que Brasil tiene la "mejor materia prima del mundo", Diniz probó a atletas jóvenes como la perla del Real Madrid Endrick, pero tampoco esa fórmula le permitió implementar el elogiado fútbol del Fluminense.
Lastrado además por bajas sensibles, el 'scratch' cerró 2023 con su peor desempeño (37 %) en este siglo, según el sitio de estadísticas Sofascore.
El registro negativo fue engrosado por las derrotas en amistosos contra Marruecos (2-1, en marzo) y Senegal (4-2, en junio) cuando Ramon Menezes, técnico de la sub-20, era el interino.
La duda del '10'
Sin título mundial desde 2002 y afrontando el desinterés de muchos compatriotas, desilusionados por humillaciones como la caída 7-1 con Alemania en la semifinal del Mundial-2014, las recientes generaciones de futbolistas brasileños son comparadas frecuentemente con las viejas glorias.
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Hasta el presidente Lula da Silva ha cuestionado la calidad de Neymar y compañía, opacados por las conquistas de la Argentina de Lionel Messi en el Maracaná en la Copa América-2021 y en el Mundial de Catar-2022.
Algunos señalan incluso que los tropiezos de los últimos años formaron taras.
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"¿Podría haber un trauma psicológico que se extiende por el inconsciente colectivo del fútbol brasileño?", se preguntó Tostão, campeón mundial con Pelé en 1970, en el diario Folha de Sao Paulo.
Brasil no gana el Balón de Oro desde 2007, con Kaká. Esperanza de una nueva distinción y ahora en el balompié saudí, Neymar, de 31 años, ha sido el faro que alumbra el juego, pero sus constantes problemas físicos han afectado su carrera.
El último de ellos, sufrido en octubre, en la rodilla izquierda, debe tenerlo de baja hasta mediados de 2024 y con la duda de si será el mismo a su regreso.
Resistido por muchos brasileños, pero goleador histórico (79 goles), 'Ney' asumió funciones de artillero ante la ausencia de un centrodelantero confiable y con Vinícius Jr y Rodrygo distantes del tino que muestran en el Real Madrid.
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Su retorno en buen nivel sería clave para el resurgir de la 'Amarela', que en marzo disputará amistosos contra España e Inglaterra.
"Brasil depende y necesita Neymar", dijo el exastro Romário al programa Boleiragem en noviembre. "En este momento, y durante algunos años más, es el gran nombre que tenemos".
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