Luego de escuchar las declaraciones de Luis Rubiales
, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol acusado de agresión sexual, la fiscal del juicio dijo que el beso a la futbolista Jenni Hermoso, durante la entrega de medallas del Mundial femenino, “fue no consentido”, como lo aseguró el exdirector este martes.
"Fue un beso no consentido, después de la prueba practicada no hay género de duda, o duda razonable suficiente", fueron las palabras de la fiscal.
Además, la Fiscalía mantuvo en pie la petición de dos años y medio de cárcel para Rubiales por el delito de agresión sexual
y otro de coacción.
Durante el juicio, que está en su recta final, el expresidente de la RFFE recalcó estar “totalmente seguro” de que Hermoso sí le dio consentimiento para besarla en ese momento, lo cual ha sido desmentido por la defensa de la jugadora.
“Ella me apretó muy fuerte debajo de las axilas, me levantó y al caer le pregunté: ‘¿si puedo darte un besito?’ Y me dijo 'vale'. Eso es lo que ocurrió”, aseveró Rubiales.
“Ya había pasado todos los árbitros y el equipo que había perdido. Le tocaba pasar a las jugadoras antes de levantar la copa; en ese momento, Jenni, cuando se acercó a mí, me puso un gesto… una cara, nos conocemos hace muchos años”, añadió.
Esto, de acuerdo con su versión, porque Hermoso había fallado un penal en ese partido definitorio al título. Dijo que, ahí, hablaron y él le insistió para que dejara de pensar en eso y le hizo la pregunta de si podía besarla en medio de la celebración.
Durante el juicio, la fiscal Marta Durántez le preguntó a Rubiales si también hubiera besado en la boca, en celebración, a un jugador de la selección masculina en las mismas circunstancias, a lo que respondió que sí, si en ese supuesto también hubiera tenido la misma confianza.
“Depende si hubiera sido un jugador con el que tengo una amistad o no. En la selección femenina había cuatro o cinco jugadoras con las que tenía una relación de mucha amistad y una de ellas era Jenni Hermoso”, aseveró el expresidente de la RFEF.