La suerte y el fútbol le sonríen a Independiente Santa Fe, que está cada vez más cerca de clasificar a la gran final de la Liga colombiana. Y todo tras la victoria como visitante (0-2) frente a La Equidad, por la segunda fecha de los cuadrangulares semifinales del FPC.
Con dos goles de extranjeros, como los del delantero uruguayo Agustín Rodríguez y el argentino Marcelo Ortiz, el león se impuso en el estadio de Techo, frente a un rival que perdonó y luego sufrió la efectividad del equipo de Pablo Peirano.
La racha que rompió el argentino de Santa Fe
Justamente, Ortiz rompió un registro que estuvo vigente durante 36 años, de acuerdo con el dato del estadígrafo Carlos Forero, que a través de sus redes sociales dio cuenta del impresionante dato.
Con su remate de media distancia que entró de picabarra y que dejó sin posibilidades al guardameta Washington Ortega, el zaguero gaucho se convirtió en el primer defensa argentino, desde 1988, en anotar para el primer campeón del fútbol profesional colombiano.
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Según él estadígrafo Forero, el último defensor de esta nacionalidad en anotar para el cuadro santafereño en el FPC había sido el recordado Jorge Raúl Balbis, que se reportó el 4 de diciembre de 1988 en la goleada (3-0) ante Cúcuta Deportivo.
¡Pero qué pasó en Techo 🌧!#VamosSantaFe 🇮🇩 pic.twitter.com/73PxaXmi5R
— Independiente Santa Fe (@SantaFe) May 13, 2024
Desde entonces ningún otro jugador que actuara en la zaga y que fuera además argentino había convertido un tanto para el equipo bogotano, aunque en el caso de Ortiz ya lo venía buscando, pues ante Junior, por el todos contra todos, puso dos asistencias.
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"Fue un partido difícil, duro. Sabíamos que el rival iba a ser así, sobre todo con la cancha y el clima. En lo personal, contento, porque me siento bien y es lo importante, con confianza. El gol sirve para mantener una diferencia que era necesaria en el partido", dijo Ortiz, protagonista de una noche especial para el equipo.
En 18 partidos con Santa Fe, el defensa ya acumula 1.576 minutos, siendo clave para el funcionamiento del colectivo, que de la mano de Peirano se ilusiona en darle una alegría a su gente, luego de casi ocho años sin probar las mieles de ser campeón en el rentado criollo.