La Copa BetPlay está generando gran expectativa en Colombia con la final entre el Atlético Nacional y el América de Cali, un evento que, según ciertas interpretaciones periodísticas, había sido predicho por el papa Francisco durante su visita al país en 2017 .
En aquella ocasión, el sumo pontífice, al dirigirse a una multitud en la Plaza de Bolívar de Bogotá, destacó la importancia del encuentro y la unidad, sugiriendo simbólicamente que incluso una final entre estos dos equipos podría ser un punto de encuentro. De acuerdo con la cobertura original, el papa, que es reconocido por su pasión futbolera, manifestó la alegría de tener en esta instancia a dos grandes del fútbol colombiano.
Los jóvenes coinciden en la música, en el arte, si hasta una final entre Atlético Nacional y América de Cali es ocasión para estar juntos
El significado del discurso del papa fue más amplio que el fútbol. Francisco animaba a los jóvenes a usar cualquier situación, incluso un partido de fútbol, como una excusa para reunirse y superar divisiones.
Las palabras del papa fueron interpretadas como una premonición, ya que el Nacional y el América accedieron a la final de la Copa después de vencer a Atlético Bucaramanga ya emocionante rivalidad entre ambos equipos, que tiene raíces históricas en el fútbol colombiano. Dimayor, la división que organiza la liga y el campeonato, aún no ha confirmado oficialmente las fechas de los encuentros finales, aunque se espera que se celebren el 11 y 15 de diciembre. Deportivo Independiente Medellín, respectivamente.
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El clásico del país
Más allá de la anécdota papal, la final presenta un enfrentamiento deportivo clásico. En los últimos cinco partidos de liga entre ambos equipos, Atlético Nacional ha ganado tres encuentros sobre América de Cali. En Copa BetPlay, esta será la segunda vez que se enfrenten; la primera fue en los octavos de final en 2023, con clasificación verdolaga.
Como en los viejos tiempos
Históricamente, estos equipos han tenido finales memorables. En 1999, América y Nacional empataron 1-1 en su primer enfrentamiento en Cali y 0-0 en Medellín, con Nacional triunfando 4-2 en penaltis en el Atanasio Girardot. Más tarde, en 2002, América logró un destacado 2-1 como visitante y aseguró el triunfo 1-0 en casa, durante las primeras definiciones de torneos cortos.
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El discurso también destacó el papel social del deporte en Colombia, resaltando cómo el fútbol puede actuar como un puente para la paz y la cohesión social en el país. En este contexto, la final entre Nacional y América de Cali simboliza más que un simple partido; representa una oportunidad de unidad para el pueblo colombiano en medio de contextos a menudo polarizados.
La atención sobre esta final refleja la pasión que el fútbol suscita en el país y la expectativa que rodea a los fanáticos de ambos equipos, quienes ven en estos encuentros una oportunidad para festejar y redefinir su cultura futbolística.
"Les basta para encontrarse en un acontecimiento como este", destacó Francisco en su histórico discurso refiriéndose a cómo las pasiones colectivas pueden crear vínculos más fuertes entre las comunidades.
El Atanasio Girardot en Medellín y el Pascual Guerrero en Cali se preparan para acoger a miles de seguidores en dos partidos que prometen ser emocionantes. Las autoridades nacionales y locales trabajan para garantizar la seguridad y el buen ambiente durante los enfrentamientos, en línea con el deseo de Francisco de transformar el fútbol en una herramienta para el encuentro y el entendimiento entre las personas.
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