Un fallido estreno de Lionel Messi en Rusia-2018 dejó a Argentina al borde del escarnio ante la debutante Islandia con apenas un empate 1-1, en un sábado en el que la única estrella fue el videoarbitraje (VAR), en su primera aparición en un Mundial.
Antes de que fallara un penal cuando el encuentro estaba 1-1, a Messi se le notaba incómodo, como perdido en el terreno, sin poder hilvanar sus clásicas acciones punzantes. Lucía como en sus peores faenas con la albiceleste.
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Parece que el crack del Barcelona en el debut en Rusia no ha podido absorber la fuerte presión por la exigencia de tener que revertir la serie de tres finales consecutivas perdidas (el Mundial-2014 y las ediciones 2015 y 2016 de la Copa América).
Una mochila muy pesada que se solo se alivianará con el título en Rusia. Y así como empezó Argentina...
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Vea aquí: Argentina empata 1-1 contra Islandia y Messi falló un penal
Para colmo, su competidor de la década, el portugués Cristiano Ronaldo, tuvo en la víspera un estreno de ensueño, anotando una tripleta en el 3-3 ante España. Una presión extra para el argentino.
El público argentino, que en gran número asistió al estadio del Spartak de Moscú, no soportaría una cuarta frustración sucesiva.
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