En la vereda Buenos Aires, sector Miralindo, en Landázuri, Santander, una comisión de la Fiscalía General de la Nación permanece en la zona investigando la masacre de ocho personas, cuatro de las víctimas integrantes de una misma familia y el resto los agresores que fueron linchados por la comunidad.
El gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, informó que los hechos están relacionados con una deuda que los agresores, cinco venezolanos, tenían con docente, Álvaro Díaz, asesinado junto a su familia.
“Hay un vínculo de un préstamo del profesor a los venezolanos quienes al recibir los mensajes de cobro ellos quisieron tomar revancha para no cancelar los $20 millones y lo que hacen es que atacan al profesor, los hijos evitar que fuera agredido también son asesinados junto a su esposa. La empleada que salió ante los gritos de la familia salió y resulta herida”, señaló el mandatario.
El hecho ha causado manifestaciones y desórdenes por lo que, tras un consejo de seguridad, las autoridades decretaron el toque en la noche a partir de las 6:00 de la tarde,
“Mantenemos el toque de queda para evitar más asonadas como lo que ocurrió ayer (domingo) donde la comunidad de rabia y dolor quiso emprenderla con las autoridades donde también hubo disparos, una persona resultó herida y la Policía tuvo que intervenir, por eso decretamos el toque de queda desde las 6 p.m. hasta que se restablezca la normalidad”, manifestó el gobernador Aguilar.
El director Nacional de la Policía, general Henry Sanabria, dijo que la asonada se registró cuando se realizaban labores de recolección de información e inspección al lugar donde ocurrieron los hechos.
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“Una asonada en el procedimiento que se estaba realizando para identificar la causa de los hechos y la identificación de los responsables”, indicó el oficial.
Por último, el gobernador de Santander hizo un llamado al ministro de Defensa, Iván Velásquez, para que se realice un consejo regional que incluya a los departamentos de Antioquia, Bolívar y Boyacá, para frenar el microtráfico y la minería ilegal en la zona del Magdalena Medio.
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