La Superintendencia Nacional de Salud sancionó con una multa de $363 millones a la clínica Foscal de Floridablanca tras demostrar que la institución aplicó la vacuna COVID-19 al cirujano plástico Camilo Reyes a principios de 2021 cuando no había sido priorizado por el Ministerio de Salud.
"Al interior de la institución prestadora no se tuvieron en cuenta los criterios de priorización establecidos por el Ministerio de Salud para la vacunación de la población en la primera etapa, ello, al suministrar en febrero de 2021 la dosis del biológico a un cirujano plástico. Así mismo, se evidenció que la Foscal suministró el servicio de vacunación en un establecimiento que no contaba con la autorización para ello como lo era la clínica Fosunab", afirmó Andrés Evelio Mora, Superintendente Delegado para Investigaciones Administrativas de la Supersalud.
Señala en el comunicado la Supersalud que la IPS desatendió los procedimientos, quebrantó la priorización determinada y, adicionalmente, no respondió oportunamente a los requerimientos y solicitudes de información formulados con ocasión de la mencionada irregularidad.