Los salones en los que reciben clases 250 niños de la escuela Juan Luis Gonzaga en Puerto Wilches, Santander, se convirtieron en un nido de murciélagos.
Los mamíferos armaron cama en los techos y ha sido imposible sacarlos.
El problema se presenta desde hace varios años y pese a la solicitud de las directivas a la alcaldía y la Gobernación de Santander en busca de una solución definitiva, la institución continúa invadida de murciélagos.
“Hemos venido haciendo acciones, pero no se han podido eliminar y para una solución necesitamos inversión que no la hemos encontrado ni en el ente departamental ni en el municipal”, confirmó Enrique Malagón, rector del colegio.
Publicidad
En una visita de inspección de sanidad de la Secretaría de Salud de Santander, el colegio fue cerrado y los niños no han podido comenzar la alternancia académica.
“Los niños tienen las ganas para volver y cuando vemos que esta sede no se pudo porque la cerraron por prevención, es complejo explicarles a los niños”, manifestó Malagón.
Publicidad
Para poder abrir de nuevo la escuela se requiere desmontar el techo en todo el colegio e instalar uno nuevo.
"Es un riesgo para los estudiantes, en la zona donde preparan los alimentos para los niños no está en condiciones y por eso nos sellaron el establecimiento", expresó una madre de un estudiante.