La Asociación de Hospitales Públicos de Santander informó que las EPS a las que el Ministerio de Salud y Protección Social les asignó los usuarios que tenía Comparta EPS, no quieren contratar con la red pública hospitalaria bajo las excusas de contar con red propia de atención, lo cual afectara las finanzas de los centros asistenciales.
Por la liquidación de Comparta EPS, se dejaron de pagar $27.000 millones a los hospitales públicos y privados de Santander por los servicios prestados a la entidad de salud.
"La imposición de las EPS de nuevas tarifas menores a las que contrataba Comparta, constituyendo una posición dominante, aprovechando la coyuntura y la crítica situación actual en el departamento. Esto es un golpe financiero que afectan a los hospitales", aseguró Nancy Cañón, directiva de Asehisan.
La Asociación de Hospitales de Santander denunció que 135.507 de los antiguos usuarios de Comparta fueron asignados a la EPS Sanitas que no cuentan con oficinas para la atención de los usuarios en los municipios de provincia de Santander.
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"La peor situación es para la provincia de García Rovira, donde hay cerca de 60 mil usuarios distribuidos en 12 municipios. Esos hospitales no recibirán los pagos del mes de agosto, lo que ya genera dificultades en sus obligaciones de nóminas, seguridad social, insumos, justo en medio de esta pandemia donde más gastos se tiene en los hospitales", manifestó la Asociación de Hospitales Públicos de Santander.
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Comparta EPS tenía 1.500.000 usuarios en 12 departamentos del país, de los cuales 200.000 eran de Santander.
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