La madrugada del domingo 11 de septiembre fue de horror y sangre en la vereda Buenos Aires, ubicada a cuatro horas del sector urbano del municipio de Landázuri, Santander.
Cinco venezolanos que trabajaban en la finca del Álvaro Diaz, tras un reclamó por el hurto de una motocicleta y el cobro de una deuda, comenzó una riña y mataron a cuchillo al profesor.
Luego procedieron hacer lo mismo con su esposa Loiden Acuya y sus hijos Johan Sebastián de 17 años y Keren Julit de 13 años .
Los migrantes para borrar las evidencias de la masacre que había cometido procedieron a quemar la casa con los cuerpos de la familia Díaz Acuña.
Rechazó ha causado en Santander el asesinato del profesor Álvaro Díaz Pineda y su familia en zona rural de Landázuri. Diferentes organizaciones sociales y educativas del departamento lamentaron los sucedido #MañanasBlu pic.twitter.com/ubZE9bDwel
— Blu Santanderes (@BLUSantanderes) September 12, 2022
"Nathalia Calle quien ayudaba en labores domesticas para la familia Diaz Acuña, se salvó de morir tras el ataque de los extranjeros. La mujer Salió herida, corrió y dio aviso de lo ocurrido a las personas que viven cerca a la finca del docente asesinado", afirmó Jhon Ruiz, secretario del Interior de Santander.
La comunidad del sector de Miralindo encontró a cuatro de los cinco asesinos de la familia Díaz Acuña cuando pretendía huir. Tres hombre y una mujer fueron linchados y murieron en una vía, reportaron las autoridades.
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Los cuerpos presentan heridas de escopeta y machete.
#Video Decretan toque de queda en Landázuri por masacre ocurrida en la vereda Buenos Aires. La procuradora de Santander, Magda Liliana Buendía, solicitó a las autoridades un informe sobre lo acontecido → https://t.co/3Ty7anMklI #VocesySonidos pic.twitter.com/8UWtrkZPjz
— Blu Santanderes (@BLUSantanderes) September 11, 2022
"Estamos buscando a una quinta persona que participó en la masacre de la familia del profesor, no sabemos si esta viva o muerta", señaló el gobernador Mauricio Aguilar.
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A la sede del Instituto de Medicina Legal de Bucaramanga serán llevados los ocho cadáveres de la matanza que se registró en Landázuri.