Padre e hijo habrían asesinado y desaparecido a dos jóvenes en Siloé, en Cali

Un padre y su hijo serían, de acuerdo con la investigación de las autoridades, los responsables de asesinar y desaparecer en Cali a dos mujeres, identificadas como Elizabeth Alejandra Rojas y Karen Gissel Canelo Guevara, de 17 y 21 años, respectivamente. El doble homicidio, registrado el pasado 19 de agosto, generó conmoción en la capital vallecaucana, luego de que días después se encontraran sus cuerpos descuartizados.

Según la investigación, el día de las desapariciones, las dos víctimas salieron del municipio de Yumbo (Valle), para encontrarse en el sector de Siloé, en zona ladera del sur de Cali, con un hombre conocido con el alias de 'El Enano'.

Esta persona, lograron determinar las autoridades, fue quien recogió a ambas jóvenes en la estación del MIO Cable de Brisas de Mayo. El objetivo, supuestamente, era llevarlas a su casa donde vivía con su hijo.

De acuerdo con versiones de testigos, la menor de edad, que después apareció asesinada, fue vista en el balcón de la vivienda de alias 'El Enano', en compañía de dos hombres.

Dos días después del encuentro, el 21 de agosto, miembros del equipo forense del CTI encontraron, en una cámara de aguas residuales, ubicada a 20 metros de la vivienda de 'El Enano', tejidos blandos de dos cuerpos, los cuales correspondían a ambas mujeres. Sin embargo, los cadáveres estaban incompletos.

Las pistas que alertaron a las autoridades y a las familias de las jóvenes fueron una serie de prendas que una de ellas portaba al momento de registrarse la misteriosa desaparición.

Fiscalìa

Una semana después, aparecieron los otros restos, en bolsas de basura arrojadas cerca de un cementerio de la zona. "Posteriormente, el instituto también confirmó que los brazos y piernas hallados el 28 de agosto, a orillas del río Cañaveralejo, detrás del cementerio de Siloé, era de la menor", expresó Sandra Eugenia González Mina, directora seccional de Fiscalías en Cali.

Durante las audiencias concentradas, los dos capturados, de 48 y 22 años, no aceptaron los cargos. De acuerdo con vecinos, padre e hijo se caracterizaban por protagonizar conductas violentas y fueron vistos con las dos jóvenes. En la vivienda donde se habrían cometido los asesinatos y desmembramientos, las autoridades encontraron muestras de sangre mediante el método de luminol.

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