Autoridades en Cali piden respetar muralismo como expresión cultural

Toda una controversia se ha vivido durante los últimos días en Cali, debido a los murales que han pintado los manifestantes durante las jornadas de protesta en el marco del paro nacional.

Parte de ellos fueron plasmados en la calle 5 con carrera 5, centro de la ciudad, con los que se reclamaba por hecho como el registrado en el barrio Llano Verde en el mes de agosto del 2020, cuando fueron asesinados cinco niños.

El domingo 4 de julio un grupo de ciudadanos con camisetas blancas llegó hasta la zona para cubrir los murales con pintura de color gris y hasta la senadora María Fernanda Cabal dio allí un discurso, en el que manifestó:

"No hay ningún derecho fundamental a la protesta".

Los manifestantes a su vez, volvieron al sector y con aerosoles rayaron los muros grises.

Durante el sábado 11 de julio, nuevamete convocaron a una 'Pintatón, esta vez con el permiso de la administración municipal y por medio de ella nuevamente pintaron los murales.

"Esto es una demostración de que no queremos volvernos la ciudad gris, la gente vino a hacer democracia y a decir que no quieren que el país siga cayendo en impunidad. Queremos memoria y poder del pueblo", dijo Alfredo Mondragón, líder social y promotor de la actividad.

"No es de que un día pinte el uno venga borre al otro día pinte el otro yo creo que estamos tan divididos que ahora dividirnos por paredes y por muros, pues no corresponde", agregó David Anaya, habitante de la Cali.

Con acompañamiento de la administración, transcurrió la jornada y aunque a través de diálogos con los colectivos se aclaró que no censurará este tipo de expresiones culturales, se concertó que los mensajes que se plasmarían, serían positivos.

"Mensajes de reconciliación mensaje de paz, de vida, solo uno de los colectivos se apartó de lo concertado y tendremos que tomar decisiones sobre la autorización de ese muro específico", dijo Roy Alejandro Barreras, director de Planeación Municipal.

Las autoridades a su vez, hicieron un llamado a la ciudadanía para que estas pinturas, no se conviertan en el motivo de una nueva disputa entre diferentes grupos sociales.

"Tenemos una sociedad muy dividida, nuestra ciudad está viviendo un conflicto social y se está expresando en el espacio público. Nuestra tarea es tratar de unir, encontrar caminos de diálogo, reconciliaci´on y encuentro para construir mensajes que nos representen a todos", agregó Barreras.

Con los rostros de algunas de las víctimas de hechos violentos en medio del paro nacional, pintados en los muros, los promotores de la actividad buscan que estas paredes preserven la memoria de su lucha.