En cuestión de meses, laisla de San Andrés pasó de recibir 34 vuelos diarios a tener máximo 17 vuelos por día, lo que explica la drástica disminución en la llegada de visitantes a este archipiélago, donde el 90% de los ingresos provienen del turismo.
Las aerolíneas decidieron reducir sus frecuencias a la isla por los altos costos que cada vez hacen menos rentable la operación, sin embargo, la disminución de vuelos está impactando negativamente al archipiélago, así lo manifestó el secretario de Turismo de San Andrés , Juan Enrique Archbold.
El año pasado, por concepto de tarjeta de turismo, la isla recibió 171.775.960.000 de pesos, pero así como pintan las cosas, este 2023 la isla podría perder unos 70.000 millones de pesos por la reducción de vuelos.
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Hasta los isleños presentan dificultades para salir o entrar a su territorio, tal es el caso de la comitiva de San Andrés que debió viajar a Anato tres días antes del evento por la poca disponibilidad de vuelos.
Dado el panorama, Archbold agregó que desde la Gobernación vienen sosteniendo reuniones con la Aeronáutica Civil, el Ministerio de Transporte y otras entidades, para mejorar la operación aérea desde y hacia el archipiélago, haciéndola un negocio más rentable para las aerolíneas.
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