Al menos 13 remolcadores y 80 barcazas se encuentran paralizadas en el Canal del Dique sin poder avanzar con sus cargas de alimento, combustible, gas licuado, cemento y otras mercancías, debido al bloqueo fluvial que hace nueve días vienen realizando las comunidades del sur del Atlántico y el norte de Bolívar para exigir obras de mitigación frente a la ola invernal.
Las embarcaciones cubren rutas entre Cartagena y Santander, a través del Canal del Dique y el río Magdalena, pero su paso por el canal ahora está restringido a la altura de los municipios de Santa Lucía, Atlántico, y San Cristóbal, Bolívar, dejando serias consecuencias económicas.
Morits Pardey, gerente de operaciones de la Naviera Fluvial Colombiana, advierte que esta situación se convirtió en "un problema de país", ya que, por ejemplo, a través de este dique "muchas empresas transportan hidrocarburos que son para el consumo interno de Colombia".
"Creemos que las pérdidas pueden estar alrededor de los 6.000 millones de pesos diarios para todas las empresas usuarias del río y, en especial, las que pasamos por el Canal del Dique", indica Pardey.
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"El hecho de que no podamos evacuar el combustóleo de la refinería de Barrancabermeja es también preocupante, porque a Ecopetrol le tocaría bajar la carga de las refinerías y eso hasta podría llevar a apagar una planta de esas, y apagarla cuesta todo el dinero del mundo", afirma.
La condición de las comunidades para levantar el paro es que llegue maquinaria amarilla a la zona y que empiecen las obras para mitigar el riesgo de inundaciones, por lo que una de las navieras se comprometió a trasladar una retroexcavadora desde Arenal hasta San Cristóbal, Bolívar, para colaborarle a la gente y convencerla de acabar el bloqueo.
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No obstante, esta empresa reconoce que sus recursos limitados y que se requieren recursos del orden nacional.
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