El desmentir un cese al fuego bilateral hasta el próximo 30 de junio ha dejado un sin sabor en municipios como Pailitas, Cesar, quienes realmente esperaban un año sin atentados y ataques criminales de grupos como el Clan del Golfo y el ELN en esta zona de la región Caribe.
Siendo Pailitas uno de los municipios más afectados por la injerencia criminal de grupos al margen de la ley en el Cesar, Carlos Javier Toro, alcalde municipal, señala que esperaban un nuevo año sin ataques criminales y atentados que, durante el año 2022, dejaron tres uniformados muertos.
En tal sentido, señala que para un mes como enero, en el que grupos como el ELN suelen perpetrar atentados en el Caribe y el resto del país en "conmemoración" a diferentes ataques como el registrado en la estación San José el pasado 28 de enero de 2018 en Barranquilla, era importante que se gestara un cese al fuego que permitiera vivir tranquilos.
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"Es lamentable que iniciemos el año sin garantías de no repetición. Escuchar que el ELN desmiente que haya negociado un cese al fuego bilateral con el Gobierno nacional nos genera una enorme preocupación a todos, toda vez que hace un año, exactamente, fuimos uno de los municipios más afectados por grupos armados", señaló el mandatario.
"El año pasado sufrimos voladura de puentes, quema de vehículos, amenazas e intimidaciones a toda la ciudadanía y, tenemos que tener en cuenta, que estos factores de violencia han impedido desarrollo y crecimiento para nuestro municipio", agregó Toro.
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El alcalde indicó, además, que de los diez atentados perpetrados por el ELN y grupos paramilitares en el departamento del César durante 2022, cinco se registraron en el municipio de Pailitas, en el que hasta el Puente Trujillos fue escenario de graves atentados con explosivos y otros artefactos lanzados en medio de un Plan Pistola.
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