Las fiestas electrónicas en el departamento del Atlántico se han convertido en el dolor de cabeza de las autoridades en medio de la pandemia delCOVID-19 .
En menos de 24 horas, dos de estos eventos fueron intervenidos por las autoridades en áreas rurales del municipio de Puerto Colombia.
Publicidad
El primero, que dejó 43 comparendos, se registró en el barrio Centro. El alto volumen de la música, sumado al constante ingreso y salida de personas, alertó a los vecinos, quienes avisaron a las autoridades, encontrando en el lugar botellas de licor, cigarrillos y, al parecer, sustancias alucinógenas.
La segunda fiesta fue intervenida en el barrio Altos de Pradomar, lugar en el que se evidenció el consumo de drogas sintéticas y, según el reporte de las autoridades, los organizadores del evento cobraban la suma de $50.000 para permitir el ingreso.
Hasta la fecha, tan solo en Barranquilla han sido intervenidas más de 1.000 fiestas residenciales desde el inicio de la pandemia, que ha cobrado la vida 3.109 personas en todo el departamento del Atlántico.
Publicidad