El Juzgado Sexto Penal Municipal de Barranquilla acogió la solicitud de la Fiscalía y decidió como medida preventiva cobijar con casa por cárcel a los seis funcionarios del Inpec que entre 2021 y 2022 habrían logrado captar 300 millones de pesos a punta de dádivas que exigían a los reclusos de la cárcel Modelo de Barranquilla, a cambio de permitirles privilegios dentro del penal.
Según la Fiscalía, estos funcionarios del Inpec también se hacían los de la vista gorda cuando estaban de guardia y permitían que los internos ingresaran armas, drogas e hicieran extorsiones, por lo tanto, les imputaron los delitos de concierto para delinquir agravado con fines de extorsión, concusión, prevaricato por omisión y enriquecimiento ilícito, cargos que no aceptaron.
Según el ente acusador, estos funcionarios del Inpec podrían obstruir la justicia, ya que habrían creado una red criminal con la que intentaron impedir la investigación, trasladando a los internos que los denunciaron y amenazando de muerte a estos reclusos para obligarlos a cambiar su versión de los hechos.
Así las cosas, la jueza de control de garantías tomó su decisión en aras de proteger la investigación. "Considera el despacho que sería razonable, idónea y necesaria para esta investigación penal la imposición de la medida de aseguramiento que ha sido solicitada por la Fiscalía, como lo es la detención de manera preventiva en sus lugares de residencia", dijo.
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Los graves actos de corrupción fueron denunciados por dos de los reclusos a los que supuestamente los miembros del Inpec extorsionaron. Ellos aseguraron a la Fiscalía que les pedían dinero por una habitación, hasta para dejarles tener elementos de aseo y permitirles el ingreso de elementos prohibidos.
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