Desde el 7 de septiembre se posesionó el curador uno de Barranquilla , Guillermo Ávila, quien se ha enfrentado a una polémica situación porque su predecesor, Armando Guijarro Daza, ha recurrido a decenas de recursos jurídicos que ha perdido. El poder de Guijarro en Barranquilla lo relacionan muchas de nuestras fuentes a su amistas con el senador Armando Benedetti, a quien el curador le donó en su momento 30 millones de pesos para su campaña.
A esto se suma que ahora apareció una tutela presentada por el veedor Walter Ortegón, ante la sala penal del Tribunal Superior del Atlántico.
Según Ortegón, el recurso fue interpuesto porque el nuevo funcionario "no cumplía con los requisitos para ejercer el cargo".
La periodista Diana Mejía Barón le puso el 'Ojo' en Mañanas BLU a este tema, ya que, hasta el 30 de septiembre había dos curadurías número uno en Barranquilla y ahora la tutela quedó en manos del cuestionado magistrado de esa ciudad Jorge Eliecer Mola Capera, que tiene investigaciones por corrupción judicial.
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La tutela busca que se caiga el decreto con el que se nombró a los dos curadores de la ciudad de Barranquilla, lo que dejaría a la capital del atlántico en vilo frente a la expedición de licencias de urbanismo y construcción.
El curador Ávila habló en Mañanas BLU y explicó que se logró recuperar más de 500 cajas y 200 bolsas con expedientes, sin embargo, no tiene la totalidad de los documentos.
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Lo que exige actualmente el curador Avila es la existencia de garantías para enfrentar el proceso, y que los perdedores, respeten los concursos meritocráticos, mas cuando el magistrado del Tribunal Superior de Barranquilla, que tiene el caso, es el cuestionado e investigado Jorge Eliecer Mola Capera.
El magistrado Mola es acusado por prevaricato por acción y enriquecimiento ilícito por usar, según la Fiscalía, la justicia para emitir decisiones contrarias a la ley.
Escuche el caso completo y las declaraciones del curador Guillermo Ávila y el veedor Walter Ortegón:
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