En la mañana de este sábado, 28 de octubre, y menos de un día de las elecciones regionales en el país, la comunidad de Gamarra, Cesar, incendió la sede de la Registraduría en este municipio en medio de protestas que surgieron como consecuencia de la revocatoria de inscripción de un candidato.
La Registraduría Nacional rechazó contundentemente el asesinato de la funcionaria Duperly Arévalo Carrascal, quien murió como consecuencia del ataque y que dejó graves lesiones en los demás funcionarios, víctimas de hechos atroces de delincuentes sin consideración, ni respeto por la vida.
“Nuestra compañera y funcionaria laboró en la Registraduría desde el año 2018 en diferentes procesos electorales y se encontraba vinculada como auxiliar administrativa para el proceso electoral en curso desde julio de este año, era madre soltera de 2 hijos de 13 y 7 años, con quienes nos solidarizamos y compartimos su dolor”, señaló la entidad a través de un comunicado.
Por su parte, el registrador nacional, Alexander Vega Rocha, solicitó a la Fiscalía General y la Policía Nacional que, en el marco de sus competencias, judicialicen de manera inmediata a los autores materiales de este asesinato y demás conductas delictivas, que se encuentran plenamente identificados en los videos y material publicado en diferentes redes sociales y que, según esta misma información, son seguidores de una campaña política en el municipio de Gamarra.
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También solicitó que se investigue, identifique y judicialice, también, a los autores intelectuales de estas conductas.
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