El niño que homenajeó a Vicente Fernández cantando sus canciones en un parque de Barranquilla

Diego Álzate tiene 7 años, es barranquillero y no ha llorado por una mujer cantando rancheras, pero quiere ser como Vicente Fernández. Es por eso que este domingo, cuando se enteró que el ‘Charro de México’ había fallecido, le pidió a su mamá que le colocara su mejor traje y lo llevara al parque que queda cerca a su casa al sur de Barranquilla: no para jugar, sino para cantar las canciones del mexicano porque quería rendirle un homenaje.

Cuando conectó su pequeño micrófono al parlante casero que su madre cargó hasta el sector del parque La Inmaculada Concepción, un chorro de voz estremeció a los que compartían en el sitio. Al principio muchos creyeron que aquel niño vestido con traje marrón estaba haciendo doblaje, pero cuando se acercaron confirmaron que la potente vocal provenía del chico que casi lloraba al interpretar los clásicos del mexicano.

“Él me dijo: mamá por favor llévame al parque que yo quiero cantar. Las personas lo fueron rodeando poco a poco, lo felicitaron y lo abrazaron por hacerlo bien. Le dijeron que siguiera su sueño cantando”, expresó Grace Gutiérrez, su madre.

Diego dice que sin nervios cantaría de nuevo por Vicente, su cantante favorito.

"Yo digo que cierren los ojos y sueñen con cantar en parques”, porque esta es la música que “desde pequeño” le gusta y nada lo hace más feliz.

Para Grace se trata de apoyar el sueño de su hijo, quien vive su propia historia de rancheras al sur de Barranquilla.

“Su maestro es Vicente. Él lo ve y dice que quiere ser como él porque sabe que empezó cuando era un niño. Él me dice: mamá yo quiero aprender, yo quiero cantar como él”, cuenta orgullosa.

Para este niño solo existe el gusto por la ranchera. Por eso le pide al ‘niño Dios’ muchos más trajes de mariachi, para seguir cantando y llenando plazas con su voz, como su ídolo.

No era aguardiente: Vicente Fernández y su paso por Barranquilla

El 'Charro de México' cautivó a sus seguidores barranquilleros un Domingo de Carnaval en el estadio Romelio Martínez, donde unas 25.000 personas cantaron con él Estos celos, el éxito del momento y el tema que lideró su gira mundial.

No solo fue esta canción la que despertó la ovación del público. Los asistentes enloquecieron cuando Fernández, en medio del 'show', se empinó una botella con el sello de un aguardiente colombiano.

Muchos creyeron que el artista estaba tomando a la par del público, sin sospechar que en realidad bebía tequila envasado en una botella del patrocinador del evento.

"Entre las cosas que pidió el hombre era que había que tenerle una botella de tequila y en aquel entonces eso no se conseguía acá, así que ellos mismos (los organizadores) decidieron traerla, pero entonces hubo conflicto con la licorera que estaba patrocinando el evento y que no iba a permitir que él tomara tequila", contó el empresario Guillermo Mendoza, quien facilitó la traída del mexicano a Barranquilla.

"Por eso hubo que envasarle el tequila en la botella de aguardiente y en una de sus presentaciones él salió y se empinó esa botella, fue una locura", recordó Mendoza.

El chef Mendoza también recordó el hombre de buen comer que fue Vicente Fernández, quien no abandonó Barranquilla hasta no probar las tradicionales butifarras que cautivaron su paladar.

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