La deportación de alias 'Digno Palomino' desde Venezuela a Colombia podría manejar diferentes matices, en el marco de la dinámica criminal que se registra en Barranquilla y su área metropolitana.
Expertos e investigadores en materia de seguridad aseguran que, probablemente, el panorama en el Atlántico se “reorganice”, dado que Palomino Rodríguez "buscaría fortalecer su estructura criminal desde una cárcel".
Luis Trejos, docente investigador de la Universidad del Norte, advierte que Digno José Palomino Rodríguez buscaría “reorganizar" sus tentáculos criminales, por lo que recomienda que el INPEC atienda el llamado del alcalde, Jaime Pumarejo, sobre recluirlo en una celda fría para evitar que siga delinquiendo.
"Es importante que las autoridades entiendan que enviar a los cabecillas a la cárcel no desarticulará a toda la organización, ya que siempre habrán segundos al mando. La estrategia radica en desarticular toda la banda, para evitar que los tentáculos se extiendan a través de más integrantes", dijo.
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Para el líder de la organización de ‘Los Costeños’ pesaba una orden de captura por concierto para delinquir con fines de estupefacientes y extorsión. En el año 2018, la Fiscalía 148 contra el Crimen Organizado de Barranquilla solicitó ante un juzgado local una orden de captura contra Digno Palomino por su presunta participación en delitos como concierto para delinquir, homicidio, tráfico, fabricación y/o porte de estupefacientes, extorsión, fabricación, tráfico, porte y/o tenencia de armas de fuego.
Cabe recordar que alias Sebastián fue puesto a disposición de Migración Colombia en la noche del lunes en Cúcuta, Norte de Santander, por parte de las autoridades venezolanas. Su traslado se hizo junto a otras dos personas buscadas por las autoridades colombianas y de los Estados Unidos.
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En la Fiscalía, ya se inició una cruzada para recopilar todos los expedientes que éste tendría abiertos en su contra por su participación como cabecilla de la banda criminal de Los Costeños.
Al menos 50 asesinatos se le atribuyen a Palomino Rodríguez, en trabajo criminal con alias Castor, entre los años 2015 y 2018. Dada su alta peligrosidad, las autoridades colombianas ofrecían una recompensa de hasta $500 millones por información que condujera a su captura.
Entre ellos se incluirían casos de desmembramiento en el área metropolitana como el de William Manotas (en abril de 2015), de un joven conocido como alias ‘El Niñito’, y la desaparición de Daniela Pinto Lozada, de quien se presume fue desmembrada y enterrada en el barrio La Bendición de Dios.
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Otra víctima habría sido Reinaldo Krauts Visbal, de 37 años, quien desapareció el 6 de julio de 2018, luego de salir de su vivienda en Malambo, Atlántico. Al parecer, su muerte habría sido ordenada por Digno Palomino, posteriormente desmembrado y enterrado en el barrio Villanueva, sur de Barranquilla.
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