En medio de globos, canticos, camisas blancas y una calle de honor que realizará la Policía Metropolitana de Barranquilla; familiares, amigos, allegados y conocidos de Medel Muñoz Medina le darán el último adiós este sábado al subintendente barranquillero, de 34 años, asesinado en medio de un ataque con explosivos en el Bordo, sur del departamento del Cauca.
El barrio 7 de abril, sur de Barranquilla, despedirá a uno de sus hijos predilectos, cuya muerte aún mantiene consternados a sus familiares; quienes lo vieron crecer, jugar y formarse como persona en este populoso sector de la capital del Atlántico, en el que aún se respiran aires de una profunda tristeza por la inesperada partida de Muñoz Medina.
El último adiós para el subintendente barranquillero, el cual se llevará a cabo en el cementerio Jardines de la Eternidad Parque Sur, se da en medio de solicitudes de justicia y reparos frente adiálogos con grupos al margen de la ley, pues sus familiares aseguran que “negociar con bandidos es una pérdida de tiempo, ya que la justicia es indeleble con ellos".
Miguel Muñoz, padre del subintendente asesinado, aseguró entre sollozos que su hijo vendría a pasar el fin de semana a Barranquilla para celebrar su cumpleaños número 34 con su esposa y sus cuatro hijos este domingo. Sin embargo, el anhelo a cuatro meses de su traslado hacia el departamento del Cauca no pudo ser posible, ya que un explosivo acabó con su vida.
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“Yo tenía la esperanza que iba a cambiar la situación con este nuevo gobierno pero no, eso no. Negociar con bandidos es perder el tiempo. Uno a veces ni entiende. Puede haber investigación, estoy casi seguro que esto lo van a pagar, pero la ley es muy indeleble con el bandido”, mencionó.
Asimismo, Muñoz cuestionó que, con el cambio de gobierno desde el pasado mes de agosto, poco sería el cambio que se ha visto frente a los temas de orden público que se presentan en esta zona del país, señalando que "se votó por un gobierno del cambio, pero ha sido imposible ver el arrepentimiento de estos grupos que tienen sometidos al país".
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El subintendente asesinado hacía parte de una numerosa familia en el sur de Barranquilla, dejando un sentimiento de dolor entre sus allegados, quienes lloran la pérdida inesperada de Muñoz Medina en medio del cumplimiento de sus labores como miembro de la Institución Armada.
"Yo tengo tres hijos, pero ahora solo me quedan dos porque se nos fue Medel. Es doloroso que sus cuatro hijos se queden sin su papá, pues están muy pequeños, el mayor tiene apenas 10 años", contó su padre en medio de lamentos.
El ataque se presentó en momentos en los que una patrulla de la Policía se desplazaba a atender un caso de orden público en la zona, cuando en el trayecto fueron sorprendidos por un artefacto explosivo que acabó con la vida de Medel Muñoz, dejando heridos a dos patrulleros más de la Policía por la onda expansiva que ocasionó el lanzamiento del elemento.
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Por su parte, el secretario de Gobierno del Cauca rechazó este nuevo ataque a la Policía y se refirió al crítico panorama que vive el departamento del Cauca, debido a la injerencia de diferentes grupos armados, como lo son las disidencias de las Farc y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
"Se ofrece una recompensa de hasta $50 millones de pesos por información que permita capturar a los responsables de este desafortunado hecho. La Policía nuevamente vuelve a llorar a uno de sus más destacados miembros", dijo.
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