Dos semanas después, el agua potable en Barranquilla, Soledad y Galapa sigue saliendo turbia de los grifos y en algunos barrios hasta marrón, y lo peor es que el problema continuará por lo menos una semana más, según la empresa de acueducto Triple A.
A la ciudad arribó maquinaria de mayor capacidad para agilizar los trabajos de remoción de la capa vegetal y sedimentos que arrastra el río Magdalena y que afecta la captación del líquido en la bocatoma del acueducto.
Pedro Bautista, subgerente de interventoría de Triple A, explicó que "en este nuevo punto se labora con el Pontón Marino, una barcaza especializada para realizar dragados mecánicos, dotada de una excavadora de 240 toneladas con una potencia de 1.200 caballos".
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Mientras tanto, no paran las quejas de la ciudadanía ya que, aunque la Triple A asegura que al agua sigue siendo potable, se han presentado casos de afectaciones gastrointestinales y, además, representa un gasto económico en la compra de botellones de agua, que en gran número de establecimientos están agotados.
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