Carestía y desempleo en Cartagena amenazan con ahogar a la población vulnerable

Los habitantes del sur de Cartagena que habitan en los barrios del sector conocido como Olaya Herrera, hicieron un angustioso llamado al Gobierno y a la clase política del país, para que en vísperas de elecciones los tengan en cuenta, porque la carestía de los productos no les ha permitido tener una adecuada calidad de vida.

Así lo hicieron saber al Bus Colombia 2022 en su recorrido por los barrios dónde se ve la pobreza y la necesidad, lejos de los modernos edificios y el centro histórico que tanto atrae turistas y extranjeros.

Sandra Bertel, vecina del barrio Zarabanda, reprochó a los políticos que solo aparecen cada cuatro años a pedir los votos, pero después no regresan.

"Llegan a estos sectores y nos buscan porque quieren nuestros votos, pero cuando son elegidos ya se olvidan que nosotros existimos y que tenemos muchas necesidades y es cuando se olvidan de que deben subirnos el sueldo, de que deben bajarle a la canasta familiar, de que deben invertirle al campo, porque no basta con que suban el salario mínimo, si los productos están más caros que antes", señaló.

Indicó que años atrás ,cuando se desempeñaba como presidenta de la junta de acción comunal del barrio ,había policías cívicos que no han vuelto a rescatar a los jóvenes de la drogadicción y la violencia.

Sebastián Hernández, consejero distrital de juventud y líder del consejo estudiantil de la Universidad de Cartagena, asegura que la falta de empleo ha desencadenado muchos problemas adicionales a los ciudadanos para sobrevivir y por eso han tenido que recurrir a oficios como el mototaxismo, lo que ha ocasionado el caos en la movilidad.

"El sistema de transporte no da abasto para una ciudad de un millón de habitantes, entonces para acceder a Transcaribe desde los barrios toca en moto y para acceder desde la periferia también, así que la moto se ha convertido en un mal necesario", explicó el joven.

Yina Vanessa Baiter, otra consejera recién posesionada, hizo un llamado a los políticos, para que no compren los votos, y a los ciudadanos para que no se dejen engañar.

"Un candidato al Senado o a la Cámara no es para que esté diciendo en los barrios 'voy a hacerte una calle o voy a hacerte una cancha o un parque', un político serio dice 'voy a hacer las leyes que van a solucionar las problemáticas del país', en ese sentido creo que la honestidad juega un papel fundamental y no estamos con la falsa expectativa de que un senador o representante nos va a solucionar el problema", concluyó.

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