No cesa la criminalidad en el Atlántico , luego de cometidos tres nuevos hechos de sangre entre la noche del viernes y la madrugada de este sábado. Según la versión entregada por la Policía Metropolitana, los hechos se dieron —de manera aislada— en menos de cinco horas.
Un primer caso se registró en el barrio Las Moras, en Soledad (Atlántico), en medio de un atentado sicarial perpetrado por dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta, quienes se dieron a la huida segundos después de haber disparado contra Alfredo Robles Pórtela, de 38 años de edad, mientras se encontraba sentado en una silla plástica.
Aunque la Policía Metropolitana de Barranquilla se encuentra indagando los móviles del crimen, no se descarta que haya sido por un posible ajuste de cuentas.
En otros hechos registrados en el barrio Villa Campestre, Puerto Colombia (Atlántico), fue asesinado Luis Miguel Ibáñez Galvis, de 59 años, en medio de un atraco cometido en el interior del edificio El Edén, ubicado en la calle 103 número 51B-40.
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Según el reporte oficial de la Policía, dos sujetos habrían irrumpido en la vivienda de Ibáñez Galvis y, junto con su hijo, resultó herido tras un cruce de disparos con los presuntos delincuentes.
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Malheridos, Luis Miguel y su hijo fueron trasladados hasta la clínica Porto Azul, donde se confirmó el deceso de este primero por la gravedad de sus heridas. Según se conoció, las honras fúnebres se llevarán a cabo en la tarde de este sábado en el cementerio Jardines de La Eternidad.
Un tercer caso se presentó en el norte de Barranquilla, sobre la calle 82, en el interior de un establecimiento comercial. La víctima fue identificada como Kevin Douglas Ospina, quien salía en ese momento en compañía de su esposa y unos amigos de un bar cuando un sicario se le acercó y le disparó en repetidas ocasiones.
El presunto homicida se dio a la huida, pero en una rápida reacción de la Policía fue capturado y le hallaron en su poder el arma con que habría cometido el asesinato. El capturado fue identificado como Carlos Antonio Peláez Ortiz, a quien le incautaron un revólver calibre 38 con cuatro cartuchos percutidos.
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